El presidente electo de Estados Unidos está listo para declarar una “emergencia nacional” y el despliegue de militares, con el fin de combatir la inmigración ilegal dentro de su territorio, de acuerdo con un reporte del activista conservador Tom Fitton que el propio Donald Trump ha confirmado.
En su cuenta de la red social Truth Social, manejada por Trump Media & Technology Group (TMTG), el director de Judicial Watch, Tom Fitton, escribió que el programa de deportación masiva de Trump está listo para la administración entrante.
Buenas Noticias: Los informes son que el presidente entrante @RealDonaldTrump está preparado para declarar una emergencia nacional y utilizar activos militares para revertir la invasión de Biden mediante un programa de deportación masiva.
Ante el señalamiento de Fitton, quien fue funcionario de Trump durante su primer gobierno, el presidente electo de Estados Unidos ha confirmado la información con una breve sentencia: “Es verdad”.
Así lo escribió el propio Trump en su red social, avalando a Fitton como fuente de la filtración noticiosa.
Presidida por Fitton, Judicial Watch es una organización de Estados Unidos que se define a sí misma como “conservadora” y que litiga contra instancias gubernamentales de ese país por la falta de transparencia o para oponerse a la entrega de fondos públicos estadounidenses a gobiernos de otros países.
Fitton se congratuló por el triunfo de Trump desde el pasado 7 de septiembre, fecha en la que envió un mensaje de felicitación al presidente electo.
Centros de detención masiva para inmigrantes
Previamente, la televisora estadounidense CNN ya había documentado que el programa de deportación masiva de Trump contará con la creación, ampliación y puesta en operación de grandes centros de detención para inmigrantes que sean considerados “ilegales”, cuyos fondos saldrían de la declaratoria de “emergencia nacional” y de la disposición de recursos del ejército estadounidense.
De acuerdo con CNN, para la operación de los centros de deportación, el futuro gobierno de Trump planea ampliar las llamadas prisiones de condado con apoyo del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (Homeland Security, en inglés).
Los centros de deportación masiva se pondrían cerca de grandes ciudades en la frontera con México, para lo cual se tendrían que comprar catres y colchonetas para que duerman los inmigrantes detenidos, previo a su expulsión de Estados Unidos.
Según las agencias internacionales, para que las expulsiones puedan llevarse a cabo, Trump necesitará hacer obligatorias las detenciones de indocumentados y evitar así que sean liberados por falta de recursos federales para mantenerlos.
Trump también requeriría emitir una orden ejecutiva y declarar una “emergencia nacional” por los peligros que presuntamente de la inmigración ilegal, con el propósito de conseguir fondos militares, una opción a la que recurrió durante su primer mandato entre 2017 y 2021.
(Con información de EFE y CNN)