MADRID (EUROPA PRESS).- El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, advirtió este miércoles que la ofensiva sobre la Franja de Gaza alcanzará cualquier “refugio” que puedan tener los milicianos del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás); horas después del asalto al hospital de Al Shifa, se jactó: “No hay lugar al que no lleguemos”.
“¿Recuerdan cuando nos dijeron que no invadiríamos Gaza? Lo hicimos. Nos dijeron que no llegaríamos a la Ciudad de Gaza. Llegamos. Nos dijeron que no entraríamos en Al Shifa. Entramos”, recapituló Netanyahu en una visita a una base de entrenamiento en Zikim, cerca de la frontera gazatí.
El primer ministro llamó a perseguir en cualquier sitio a los “asesinos de Hamás” para “eliminarlos” y recuperar a los rehenes, dos “misiones sagradas” para Netanyahu, según declaraciones difundidas por su propia oficina.
Esos compromisos los confirmó Netanyahu al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en una nueva conversación telefónica el martes 14 a última hora.
El primer ministro llamó a seguir en Gaza hasta conseguir “una victoria completa”, sin que por ahora esté claro cuánto puede durar la operación israelí bautizada como “Espadas de Hierro”.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) justifican su intervención en el hospital de Al Shifa, el mayor de la Franja de Gaza, como una operación “precisa” contra miembros de Hamás, a quienes acusa de utilizar las instalaciones como escudo para sus actividades armadas.
La ONU expresó su preocupación por la ofensiva israelí, también a través de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El secretario general adjunto de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, recordó este miércoles que “los hospitales no son campos de batalla”, en un nuevo llamamiento al gobierno de Netanyahu a respetar el Derecho Internacional.