Es un hecho: despertar con dolor de cabeza es una de las peores formas de iniciar el día. Aunque es algo relativamente común, las causas de este padecimiento pueden ser muy variadas.
De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Leiden en los Países Bajos, un 40 por ciento de las migrañas suelen ocurrir al despertar y, aunque no existe una razón específica para ello, se conocen algunas de sus causas.
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Desde la adicción a la cafeína hasta el estrés, pasando por la apnea del sueño o incomodidad a la hora de dormir, las causas de este tipo de malestar matutino son muchas y muy distintas.
Según la investigación, llevar un buen control sobre cada cuánto y bajo qué circunstancias amanecemos con este tipo de malestar puede ser clave para descubrir su origen y tratarlo adecuadamente.
¿Dolor de cabeza o migraña?
Lo primero es distinguir si lo que se padece es un dolor de cabeza o migraña. Según la definición de los Centros de Control de Enfermedades de Estados Unidos, un dolor de cabeza se define como una sensación de malestar general en la cabeza, no focalizado.
Entre los orígenes más comunes de este padecimiento se encuentran la falta de cafeína, el uso constante de analgésicos o incluso un descanso inadecuado, el cual puede ser interrumpido por ronquidos o despertarse continuamente durante la noche.
La migraña se distingue por una sensación de palpitación en la cabeza, sensibilidad a la luz y a los ruidos altos y el dolor puede focalizarse en un solo lado, además de que suele tener una mayor intensidad.
Este padecimiento tiene aún más orígenes: desde comer demasiado chocolate o queso, permanecer hasta altas horas con el teléfono en la mano, estrés o incluso cambios en la rutina cotidiana o alteraciones hormonales.
¿Cómo evitar los dolores de cabeza matutinos?
Según el artículo de la Universidad de Leiden, mantener una buena higiene del sueño es clave para tener un buen descanso y, en consecuencia, amanecer lleno de energía y sin dolor de cabeza.
Entre las cosas que puedes incluir fácilmente en tu rutina antes de dormir, se encuentra cenar ligero y por lo menos tres horas antes de irte a dormir y evitar grandes cantidades de alimentos ricos en grasas, chocolates o quesos.
Durante el sueño, usar una guarda para los dientes es ideal para aquellas personas que rechinan los dientes o roncan. Tomar un vaso de agua tibia minutos antes de acostarte también es recomendado.
Otros ejercicios recomendados por los expertos neerlandeses implican disminuir el uso del celular o ver la televisión por lo menos media hora antes de dormir e incluso meditar unos 10 minutos podrían ayudarte a liberar el estrés y tener un sueño reparador.