18
Feb
En nuestra cama suelen esconderse diminutos habitantes capaces de perturbar nuestra paz y salud sin siquiera ser visibles al ojo humano: los ácaros del polvo. Esos microscópicos seres buscan lugares cálidos y húmedos como hogar, por lo que nuestras sábanas, almohadas y colchón son lugares perfectos, además de que se alimentan de las células de piel que desprendemos. Hay varias señales para saber que tienes que hacer una limpieza profunda para evitar ser víctima de estos familiares de las arañas. La Clínica Mayo señala que la alergia a los ácaros se manifiesta de formas que pueden confundirse fácilmente con la…