La caravana ‘Éxodo de la pobreza’ llegó a su fin y se desintegró a la altura del municipio de Jalapa del Marqués en territorio oaxaqueño, confirmaron los coordinadores.
Informaron que el gobierno de Oaxaca, a través de la Secretaria de Gobierno y de los coordinadores de Paz en el Istmo, les ofreció camiones de la línea Istmeños, para trasladarlos por el estado de Veracruz; sin embargo, en Tierra Blanca y Acayucán, municipios de esa entidad, 10 autobuses fueron detenidos, señalados por tráfico ilegal de personas.
Otros 10 autobuses fueron liberados porque las personas migrantes aceptaron retornar a Oaxaca.
La caravana Éxodo de la pobreza, como fue llamada por sus organizadores, llegó a territorio mexicano por la frontera sur el pasado 24 de diciembre pasado, con personas migrantes de Centro y Sudamérica, especialmente de Honduras, Guatemala, y Venezuela.
“Es una tristeza que no nos hayan dado garantías para seguir nuestro camino, nosotros lo pedimos con anticipación, nosotros no somos delincuentes” dijeron los migrantes que actualmente están dispersos en diversos municipios del Istmo de Tehuantepec.
A los coordinadores, las autoridades los amenazaron de que dejaran de presionar exigiendo camiones y las visas humanitarias, por lo que ellos decidieron continuar solos su anhelo de llegar a los Estados Unidos.
“Estamos tristes por la desintegración, unos se quedaron en Oaxaca, y otras ya están en Veracruz siguiendo la ruta, el gobierno nos mintió, no sengañó, nosotros lo que queríamos era llegar a la Ciudad de México y de ahí a la frontera norte, no pedíamos más que eso, y mira, ahora cada quién tomó su camino”, expresó Jennifer Hernández de Honduras.
Jennifer de 30 años de edad está en Juchitán, ella fue una de las 400 migrantes que regresaron al territorio istmeño para seguir su camino por la capital oaxaqueña. Viaja con una hija de 8 años y un bebé de 9 meses de edad y su sueño es alcanzar a su esposo que migró hace 8 años a los Estados Unidos.
La travesía no ha sido nada sencilla, tengo que pedir en los cruceros unas monedas para comprar la comida de los niños, nos bañamos donde podemos. Están enfermos, las autoridades no nos dan servicio médico, son las personas que se apiadan de nosotros y nos dan una fruta, agua o comida, inclusive hasta ropa.
Desde agosto del año pasado, el arribo masivo de personas migrantes creció por la frontera sur, al día llegan entre 500 a 800 personas, y se hospedan en hoteles, otros duermen en la calle y otros en terminales de autobuses.
El año pasado, el gobierno mexicano habilitó un refugio temporal, el cual cerró los primeros días de este año, sin embargo sigue funcionando sin la protección de las autoridades.
Retienen a 10 chóferes y los acusan por presunto tráfico de migrantes
La mañana de este jueves, familiares de 10 choferes de la línea de transportes “Istmeños” montaron un bloqueo carretero para exigir a las autoridades de Oaxaca su liberación, tras ser detenidos por trafico ilegal de personas, al trasladar a personas migrantes de la caravana “Éxodo de la pobreza”.
Las esposas, hijas, hijos y familiares contaron que los 20 autobuses de la línea Transporte Istmeños trasladaban a más de 400 migrantes de la caravana con destino a Veracruz.
Luego, 10 camiones fueron retenidos en Tierra Blanca y otros 10 en Acayucán, pero en estos últimos, las personas migrantes aceptaron retornar y fueron liberados.
“Los culpables de que los choferes estén detenidos es el gobierno de Oaxaca, el propio Chucho Romero, porque a través de los Delegados de Paz en Juchitán, contrataron los servicios de estos autobuses para trasladar a los migrantes de la caravana “Éxodo de la Pobreza” hacia el estado de Veracruz y ahí los detuvieron”, denunciaron.
El error dijeron, es que el gobierno de Oaxaca no informó a las autoridades de Veracruz ni a las de migración del trasladado de las personas migrantes.
“Lo que pedimos es la inmediata liberación de nuestros familiares, y el apoyo directo del gobierno de Oaxaca, ellos contrataron a los autobuses y ellos liberarán a los choferes. No es posible que los acusen de trafico ilegal de personas, cuando el propio gobierno los contrató, esto es un abuso, una violación a sus derechos humanos y exigimos que los dejen libres”, indicaron.
Las familias dijeron que, de no liberar a los choferes, reforzarán sus manifestaciones por todo el estado.