El presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, comparecerá en el pleno del Congreso de los Diputados el próximo miércoles 22 de mayo, para explicar los negocios de su esposa, Begoña Gómez, y contestar a las acusaciones de los conservadores del Partido Popular (PP) sobre un posible conflicto de intereses.
La comparecencia llegará casi un mes después de los días de reflexión que Sánchez se tomó para seguir al frente del Ejecutivo español después de que un juzgado de Madrid abriera diligencias tras la denuncia presentada por un sindicato ultraderechista contra la esposa del presidente.
Sánchez anunció el 24 de abril que se daba cinco días para reflexionar si merecía la pena seguir como presidente, tras la campaña de “acoso y derribo” contra él de la derecha (PP), la ultraderecha (Vox) y medios y organizaciones afines a ambos, y que incluían ataques a su esposa.
La Junta de Portavoces reunida este martes en el Congreso aceptó la propuesta del socialista de comparecer en la Cámara Baja para dar cuenta del último consejo europeo y de otros asuntos como las relaciones de España con Gibraltar y el reconocimiento del Estado palestino.
La comparecencia se producirá después de que el PP le haya solicitado en varias ocasiones que explicara los negocios de su mujer con el grupo Globalia y las supuestas relaciones de Begoña Gómez con el rescate público de empresas como Air Europa, donde los conservadores ven un posible conflicto de intereses.
“No tenemos nada que ocultar y el presidente del Gobierno menos”, recalcó el portavoz de los socialistas en el Congreso, Patxi López, en la rueda de prensa en la que anunció que Sánchez acudirá al Congreso para responder también la petición del PP de explicar su última gira por Polonia, Noruega e Irlanda con el fin de encontrar respaldo europeo al reconocimiento del Estado palestino.
“Y para que hablen de lo que según ellos tiene que ver con un conflicto de intereses que dicen que afecta al partido y al entorno del presidente del Gobierno“, señaló López.
El portavoz del PSOE en la Cámara Baja instó al PP a moderar su discurso en este próximo debate y a girar hacia una intervención “constructiva” aunque dijo que “no espera mucho”.
“Cualquier cosa de su estrategia política lamentable. Yo creía que vivía en un país que había que demostrar con pruebas la culpabilidad y no la inocencia”, puntualizó el portavoz.