El primer vuelo con turistas y población varada en Acapulco, Guerrero, tras el huracán Otis ya salió rumbo a la Ciudad de México, informó el director general del Grupo Aeroportuario Centro Norte (OMA Aeropuertos), Ricardo Dueñas.
“Esta mañana iniciamos el puente aéreo entre Acapulco y la CDMX. Ya se ha sacado a salvo al primer grupo de pasajeros varados”, escribió este viernes a través de la red social X (antes Twitter).
La salida de aeronaves que rescatarán a las personas que se han quedado varadas en Guerrero continuarán a lo largo del día, detalló el director.
El puente aéreo que evacuará a los turistas y locales varados comenzó operaciones este viernes y trasladará a las personas desde Guerrero a la Ciudad de México.
Aeroméxico, Viva Aerobus y Volaris son las aerolíneas comerciales que están a cargo de la la transportación gratuita de personas, ayuda humanitaria, personal médico y rescatistas.
Los vuelos comerciales en la zona fueron cancelados y los únicos aviones que operarán serán los destinados a ayuda humanitaria y bajo coordinación de la autoridad.
Además, los vuelos de Sedena y Marina que llevan ayuda humanitaria, regresarán a la Ciudad de México con personas evacuadas.
Esto debido a que el Aeropuerto de Acapulco se encuentra dañado. Sin embargo, el titular de la Secretaría de Marina (Semar), el Almirante José Rafael Ojeda Durán, dijo que la pista “está en buen estado y puede recibir a los aviones”.
A su vez, el director general del Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS), Zoé Robledo, informó que el primer contingente de personal médico especialista salió este viernes desde el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) para reforzar la atención de la población en Guerrero.
Además, se está instalando un segundo puente aéreo en la Base Aérea Militar número 7 que se ubica en Pie de la Cuesta, lugar en el que también se van a concentrar todas las despensas que serán entregadas, informó este viernes el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval.
Asimismo, el jueves se establecieron dos puntos fuera de la ciudad de Acapulco para que un total de 150 autobuses evacuen a personas.
Otis pasó en menos de 24 horas de ser una tormenta tropical a un huracán de categoría 5, la más alta de estos fenómenos naturales, con dirección a las costas de Guerrero, donde afectó a zonas densamente pobladas, lo que ha alertado a autoridades municipales, estatales y federales.
Al menos 27 personas fallecieron y 4 desaparecieron tras el paso del fenómeno. A esto se suman daños en cristales y fachadas de plazas y locales comerciales. Asimismo, el 80% de los hoteles en el puerto de Acapulco se vieron afectados.