Mantener un hogar es una tarea difícil y es que más allá de todos los gastos que implica el ser una persona independiente, el tener cada habitación en completo orden y realizar las tareas de limpieza necesarias para crear una atmósfera acogedora y limpia, es uno de los retos más grandes para las personas que no son fans de la tareas domésticas, porque a pesar de ser una obligación necesaria para tener mejor calidad de vida, es justo afirmar que no a todas las personas les agrandan estas labores.
Y son justamente estas personas quienes sufren más al ver las habitaciones de su hogar abarrotadas de desastre, pero por suerte existe una técnica que cuando se convierte en hábito puede ayudarte a mantener el orden en cualquier lugar, sin necesidad de invertir mucho tiempo en ello y así liberarte un poco de la carga mental que implica ser una persona desordenada. Esta técnica tan amada por muchas personas se llama Método Kaizen y tiene su origen en una filosofía japonesa ideal para quienes odian las tareas domésticas.
Fotografía: Freepik.
Método Kaizen: la técnica para organizar tu casa en menos de un minuto
Kaizen, una palabra que fusiona Kai que significa cambio y Zen que se traduce como sabiduría, encarna la búsqueda constante de mejoras en la vida personal, familiar, social y laboral, este método se basa en la repetición diaria de una tarea durante 60 segundos, transformándola en una rutina, para que a lo largo de los días, este hábito se perfeccione hasta integrarse de manera natural en nuestra vida cotidiana, pero lo notable es que este proceso es que sólo demanda un minuto al día, requiriendo un esfuerzo mínimo.
El secreto radica en plantearse una pregunta rutinaria ante una nueva tarea: “¿Puedes hacerlo o resolverlo en menos de un minuto?” Si la respuesta es afirmativa, simplemente realizas la tarea en cuestión y, según algunas personas que lo practican, es sorprendente la cantidad de aspectos que pueden resolverse en menos de sesenta segundos y el impacto positivo que tienen en la salud mental y la apariencia del hogar, por lo que este hábito se ha convertido en una auténtica revolución en su vida diaria.
Fotografía: Freepik.
El método Kaizen busca establecer hábitos de manera progresiva, para ello puedes comenzar con dedicar un minuto diario a una tarea, y con el tiempo, puedes ir aumentando el tiempo dedicado a dicha actividad; pero antes de embarcarte en este camino de mejora constante, es crucial tener en cuenta algunas reglas fundamentales que te conducirán al éxito:
- Evitar excusas.
- No buscar la perfección, la rapidez es más relevante.
- Las dificultades despiertan la sabiduría.
- Identificar las causas y soluciones.
- Corregir los errores.
- Buscar ayuda de diversas personas.
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A su vez, este método se desglosa en cinco fases, siguiendo la división de las 5 ‘S’:
- Primera fase, Seire: implica eliminar lo innecesario, deshaciéndote de lo que ya no necesitas, despejando la base del desorden en tu hogar.
- Segunda fase, Seiton: una vez desechado lo innecesario, comienza la organización, todo debe tener su lugar asignado, facilitando la búsqueda y evitando pérdidas de tiempo.
- Tercera fase, Seiso: tras la organización, se inicia la limpieza; al principio puede llevar más tiempo, pero al aplicar el método diariamente, se vuelve más sencillo, este paso enfatiza la importancia de mantener un hábito regular de limpieza para conservar la casa en buen estado.
- Cuarta fase, Seiketsu: estandariza los pasos anteriores, convirtiéndolos en una rutina diaria, el objetivo es que este proceso se internalice y forme parte de tu vida cotidiana.
- Quinta fase, Shitsuke: la última etapa es la disciplina, por ello debes mantener la disciplina en cada paso, permitiéndote despreocuparte del orden y la limpieza en tu hogar. A medida que eliminas lo innecesario y cada cosa encuentra su lugar, la rutina diaria se acorta y se vuelve más sencilla, este proceso se convierte en una costumbre que se integra de manera natural en tu vida diaria.
Fotografía: Freepik.
Es así como el método Kaizen puede resultar una verdadera salvación para aquellas personas que se encuentran con apretadas agendas y sienten que les falta tiempo para realizar las labores del hogar, o para quienes simplemente se les dificulta realizar las tareas del hogar ya que con solo ajustar algunos hábitos, es posible lograr que tu casa luzca ordenada y organizada con un esfuerzo mínimo, por lo que este enfoque se ha popularizado no solo por su eficacia, sino también por su simplicidad y su capacidad para producir resultados duraderos y significativos en la vida cotidiana, debido a que al adoptar esta filosofía implica comprender que no se necesita una transformación radical para lograr cambios significativos.
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