El número de bombardeos israelíes perpetrados este martes contra Beirut tras una emisión de órdenes de evacuación sin precedentes se eleva ya a al menos cinco, uno de los cuales alcanzó el corazón comercial y área insignia de la ciudad, Hamra. Esto se produce a horas de que entre en vigor el ato al fuego entre Israel y Líbano.
En el barrio y campo de refugiados Shatila, al sur de Beirut, Líbano, residentes aguardan el fin de las hostilidades. Fue en ese punto donde en 1982 la Falange Libanesa, con la omisión del Estado de Israel, masacró a más de 3 mil palestinos desarmados, incluyendo niños, mujeres y adultos mayores.
Fotos: Manuel Ortiz Escámez, periodista mexicano. Para Aristegui Noticias, en colaboración con Global Exchange / Social Focus / Mundo Abierto
Muchos residentes abandonaron la mitad occidental de la urbe tras los avisos de Israel y buscaron refugio.
Se espera que la escalada de este martes continúe hasta la entrada en vigor del alto el fuego.
Algunas zonas quedaron inhabitables tras los ataques.
Entre los escombros se aprecian vestigios de las víctimas.
Llevará tiempo limpiar y recuperar las zonas.
Algunas personas se aferran a sus viviendas.
Jóvenes recorren la zona.
Se espera que Israel aproveche hasta la última hora para realizar ataques.
Aguardan a que el cese al fuego sea respetado.
La Agencia Nacional de Noticias (ANN) ha informado hasta el momento de ataques contra las zonas de Nuwairi, Barbour, Mar Elias, Zouqaq el Blat y Hamra, esta última considerada un importante núcleo comercial y que no había sido atacada anteriormente en más de dos meses de ofensiva aérea israelí.
“La histérica agresión israelí de esta noche contra Beirut y varias regiones libanesas, dirigida especialmente contra civiles, reafirma que el enemigo israelí hace caso omiso de todas las leyes y consideraciones”, denunció el primer ministro libanés, Najib Mikati, en un comunicado.
Según la nota, los ataques contra Beirut subrayan específicamente “la animadversión del enemigo hacia la ciudad”, por su papel de refugio para todos los libaneses.
Todo ello se produce también entre renovados ataques contra los suburbios meridionales de la capital conocidos como el Dahye, que llevan siendo bombardeados de forma intensa desde hace dos días.
Se espera que la escalada de este martes continúe hasta la entrada en vigor del alto el fuego, como medida de presión para garantizar su implementación y como un intento de arrasar una última tanda de objetivos antes del potencial cese de la campaña de bombardeos. EFE