El calor “infernal” que azota a la ciudad no parece dar tregua y es que a pesar de que el sol no se encuentre en el cielo, el ambiente suele sentirse tan caliente que resulta imposible sobrevivir sin un ventilador. Pero además de las prendas que son recomendables para enfrentar las altas temperaturas, expertas en salud recomiendan medidas preventivas para combatir los efectos del calor porque muchas veces el agua fresca no es suficiente.
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¿Cómo saber cuándo debo tomar un suero oral?
Según expertas, durante periodos de calor extremo, el cuerpo humano pierde una cantidad significativa de agua y electrolitos a través del sudor. Esta pérdida puede conducir rápidamente a la deshidratación, especialmente en personas vulnerables como infancias, adultos mayores y quienes padecen enfermedades crónicas. Por suerte el suero oral, una solución que contiene sales minerales y glucosa, ayuda a reponer estos electrolitos perdidos y a mantener el balance de líquidos corporales.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el suero oral es una de las formas más efectivas para prevenir y tratar la deshidratación leve a moderada. La OMS proporciona una fórmula específica que incluye sodio, cloruro, potasio, y glucosa, diseñada para maximizar la absorción de agua en el intestino; si bien el consumo regular de agua es fundamental para evitar una deshidratación, hay algunas señales que indican cuándo es necesario sustituir este líquido por un suero oral:
- Si has estado sudando profusamente debido al calor o al ejercicio, o has sufrido episodios de diarrea o vómitos, es crucial reemplazar no solo el agua, sino también los electrolitos perdidos.
- Síntomas de deshidratación: estos incluyen boca y garganta secas, sed intensa, menor frecuencia de micción, orina oscura, fatiga, mareos y confusión. En estos casos, el suero oral puede ayudar a rehidratar el cuerpo de manera más efectiva que el agua sola.
- Prevención en condiciones de riesgo: en días extremadamente calurosos, o si planeas estar activo al aire libre, consumir suero oral puede ayudar a prevenir la deshidratación. Esto es especialmente importante para personas de alto riesgo como niños pequeños, ancianos, y aquellos con enfermedades crónicas.
¿Cuáles son los riesgos de tomar suero oral todos los días?
Tomar suero oral diariamente no suele ser necesario para la mayoría de las personas que llevan una vida saludable y tienen una dieta equilibrada, ya que este se encuentra específicamente diseñado para rehidratar y reponer electrolitos perdidos durante episodios de deshidratación moderada a severa. Es así como consumirlo todos los días sin una necesidad médica específica puede conllevar ciertos riesgos, algunos de los más significativos son:
- Desequilibrio electrolítico: el suero oral está diseñado para reemplazar rápidamente electrolitos perdidos, como sodio y potasio. Un consumo excesivo puede llevar a niveles anormalmente altos de estos electrolitos, lo que puede ser peligroso. Por ejemplo, el exceso de sodio (hipernatremia) puede causar síntomas como sed intensa, confusión, convulsiones, y en casos severos, puede ser mortal. De manera similar, demasiado potasio (hiperkalemia) puede afectar la función muscular y cardíaca, y también puede ser grave.
- Carga de líquidos: el consumo excesivo de cualquier tipo de líquido, incluido el suero oral, puede llevar a una sobrecarga de líquidos si los riñones no pueden eliminar el exceso eficientemente. Esto puede resultar en condiciones como edema (hinchazón causada por la acumulación de líquido en los tejidos) y problemas en el funcionamiento del corazón y los riñones.
- Interferencia con la dieta normal: si se consume en grandes cantidades, el suero oral puede reducir el apetito o reemplazar la ingesta de alimentos normales, lo que podría llevar a desequilibrios nutricionales y falta de otros nutrientes esenciales que no están presentes en el suero.
¿Cuáles son los síntomas de la deshidratación?
La deshidratación ocurre cuando el cuerpo no tiene suficiente agua para funcionar correctamente. Es importante tratar la deshidratación tan pronto como se reconozcan los síntomas, ya que en casos leves a moderados, esto puede implicar simplemente aumentar la ingesta de líquidos y, si es necesario, el uso de soluciones de rehidratación oral. Sin embargo, la deshidratación severa es una emergencia médica que requiere atención inmediata en un entorno hospitalario. Aquí están algunos de los síntomas comunes, que pueden variar en severidad dependiendo del grado de deshidratación:
- Sed intensa: este es uno de los primeros signos y a menudo el más obvio de deshidratación.
- Boca y labios secos: la falta de humedad en la boca y los labios es un signo temprano común.
- Disminución de la producción de orina: cuando estás deshidratada, el cuerpo trata de conservar líquido, lo que resulta en menos orina. La orina también puede ser más oscura de lo normal y más concentrada.
- Fatiga o letargo: la deshidratación puede hacer que te sientas cansada o agotada sin una razón aparente.
- Dolores de cabeza: la falta de hidratación adecuada puede causar dolores de cabeza.
- Mareos o sensación de aturdimiento: estos pueden ocurrir, especialmente al ponerse de pie rápidamente, debido a una disminución en el volumen de sangre y presión arterial.
- Piel seca o falta de elasticidad en la piel: la piel puede parecer más seca y perder su elasticidad; cuando se pellizca, puede tardar más en volver a su forma normal.
- Ojos hundidos: este es un signo más grave de deshidratación.
- Confusión o irritabilidad: la deshidratación severa puede afectar la función cerebral, resultando en confusión, irritabilidad o incluso delirio.
- Aumento de la frecuencia cardíaca y respiración rápida: estos síntomas pueden presentarse como el cuerpo trata de mantener un suministro adecuado de oxígeno y nutrientes a los órganos.