La Habana (France 24).- . El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, negó que las medidas de ajuste económico que dictó su gobierno para paliar la crisis económica que sufre la isla y que ha empujado a miles de cubanos a abandonar el país sean parte de un programa económico de corte “neoliberal”.
Entre las medidas de ajuste decididas por el gobierno cubano se incluyen aumentos en los precios del combustible y de la electricidad, así como la reducción de subsidios de la canasta de alimentos.
En la clausura del último periodo de sesiones de 2023 de la Asamblea Nacional, el viernes 22, el presidente Miguel Díaz-Canel reiteró que las medidas buscan hacerle frente a la crisis económica que sufre la isla.
El paquete de medidas fue anunciado luego de los alarmantes datos que arrojó el Ministerio de Economía cubano: en 2023, la economía se contrajo entre 1% y 2%, en tanto que inflación creció hasta rondar 30%.
El turismo, la actividad que genera más ingresos a la isla, sufrió caídas significativas en el transcurso del año.
En su alocución dirigida a la Asamblea Nacional, Díaz-Canel dijo que se trata de “decisiones complejas, como complejo es el momento” que atraviesa el país caribeño, que además reporta escasez de bienes básicos.
“Nada nos haría más felices que anunciarles que suben los salarios y que tendremos divisas y combustibles suficientes para terminar con el agobio que provocan las carencias”, declaró el presidente cubano.
Díaz-Canel rechazó críticas contra su gobierno que advertían sobre la aplicación de un programa de ajuste de corte neoliberal:
“Afirmo enfáticamente que para nada existe un paquete neoliberal contra el pueblo ni una cruzada contra las mipymes (pequeñas empresas privadas), ni la eliminación de la canasta básica, como ya la contrarrevolución está poniendo en las matrices (de opinión).”
El plan de ajuste del gobierno cubano
El programa de medidas económicas anunciadas el miércoles 20 por el primer ministro Manuel Marrero implican aumentos en precios y tarifas de los servicios básicos, como el agua potable, el gas y la energía eléctrica, además del combustible.
Con ese plan, el gobierno de la isla proyecta reducir los subsidios estatales con el objetivo de equilibrar la economía.
La Cartilla de Racionamiento –programa instaurado hace más de 60 años para distribuir alimentos– también será recortada, y los subsidios se enviarán a personas que para el gobierno estén en condiciones de vulnerabilidad.
“Hoy nosotros le subsidiamos lo mismo a un ancianito pensionado que al dueño de grandes negocios privados que tiene mucho dinero”, argumentó el presidente Díaz-Canel.
De acuerdo con una investigación de la agencia EFE, el azúcar y el café son los productos que más se han ido reduciendo en esa canasta de alimentos, siendo los últimos 20 años los más críticos.
El café pasó de un promedio mensual de 62 gramos en 1996, en medio de la gran crisis por la caída del bloque soviético –conocida en Cuba como el “periodo especial” –, para subir a 207 gramos en 2003 y caer en 2023 a sólo 20 gramos, es decir, 90% menos en las últimas dos décadas.
En tanto, el azúcar refinada pasó de una media mensual en 1996 de 1.1 kilos, a 1.6 kilogramos en 2003 y a 700 gramos en 2023.
El informe señala que a Cuba le cuesta mil 600 millones de dólares anuales garantizar los alimentos de la canasta básica.
La economía cubana y sus proyecciones para 2024
La economía de Cuba, agobiada por las sanciones de Estados Unidos y el embargo económico desde hace más de 60 años, la escasez de turismo y los problemas que dejó la pandemia de covid-19, está en crisis, con una escasez alarmante de combustible, alimentos y medicinas, más un transporte público escaso y tensiones sociales en aumento.
Según datos oficiales, Cuba registra un déficit de casi 19% de su PIB al finalizar 2023, el mayor desde 1993.
Esto es acompañado por la inflación del mercado formal, que se estima que cierre el ejercicio en torno a 30%, siendo los alimentos los productos que más sufren variación de precios.
Y si bien los pronósticos del gobierno esperaban que este año la economía creciera 3%, la situación económica de la isla generó todo lo contrario: “Es posible que tengamos una contracción del producto interno bruto este año, que podría ser de entre 1% y 2%”, dijo el ministro de Economía de Cuba, Alejandro Gil, en la sesión de fin de año de la Asamblea Nacional.
Eso implicaría que la economía se redujera 10% en comparación con 2019. Sin embargo, las autoridades económicas de la isla estiman para 2024 una expansión de 2%, según informó Reuters.
Díaz-Canel señaló que las “profundas distorsiones y deformaciones estructurales” en la economía están afectadas por el reforzamiento del embargo económico de Estados Unidos, los efectos de la crisis en las relaciones económicas internacionales y también los “errores propios”.
Y recalcó que la situación de la isla es la de una “economía de guerra”.
Desde la cartera de Economía aseguraron que los ingresos por exportaciones ascendieron a 9.1 mil millones de dólares en 2023, cantidad significativamente menor que los 9.9 millones de dólares previstos y que los 12 mil millones de dólares de 2019.
Para 2024, Cuba podría exportar 650 millones de dólares más en bienes y servicios, según el Ministerio de Economía, con la mayor cantidad de ganancias provenientes de sus principales industrias: el turismo, la farmacéutica y los servicios relacionados con la salud.