El gobierno de Javier Milei anunció el envío de fuerzas federales a la ciudad de Rosario, tercera ciudad en Argentina, para enfrentar al narcotráfico, tras cuatro asesinatos de civiles en los últimos días, perpetrados por “narcoterroristas” según el ejecutivo.”Tras un pedido del gobernador (de la provincia de Santa Fe) Maximiliano Pullaro (…) la Policía Federal, la Gendarmería Nacional, la Prefectura Naval, la Policía de Seguridad Aeroportuaria y el Servicio Penitenciario asistirán a la policía de Santa Fe en su combate contra el narcotráfico”, publicó en la red social X la Oficina del Presidente de la República Argentina, Javier Milei.
El anuncio tiene lugar tras una serie de hechos de violencia en esta ciudad junto al río Paraná, ubicada 300 km al norte de Buenos Aires y la tercera en tamaño de Argentina con 1.3 millones de habitantes, donde dos taxistas, un chofer de ómnibus y un empleado de una estación de servicio fueron asesinados esta semana.
“Hay muchas figuras políticas en Argentina que están apelando fuertemente a la idea del modelo salvadoreño. El problema es que están hablando de Bukele y El Salvador en términos de la militarización en la seguridad, cuando en verdad lo que cambia drásticamente en El Salvador es justamente cómo se gestiona la justicia, cómo se aceleran los procesos y se ofrecen menos garantías a los procesados. Eso es lo que el núcleo de la estrategia salvador, no la militarización en sí” explica Andrei Serbin Pont, analista internacional y presidente del CRIES, en la antena de RFI.
El experto en seguridad también evocó la diferencia con Brasil: “En Brasil nos encontramos con instancias en las cuales los grupos armados no solo tienen un mayor grado de complejidad, sino que le disputan control territorial al propio Estado, que no es lo que vemos en Rosario. No sé si lo que estamos viendo el gobierno argentino es necesariamente una importación. Sí hay un interés por dar una respuesta muy contundente. Por ende, se apela mucho al modelo de la militarización, de la seguridad. Pero esto no trata la problemática de fondo” subraya Serbin Pont.
Dada su ubicación a las orillas del río Paraná, en Rosario desembocan las drogas provenientes de Brasil, Bolivia y Paraguay, y además tiene la peor tasa de homicidios del país, 22 por cada 100.000 habitantes. “Rosario hoy por hoy, lo que necesita principalmente en lo inmediato, pero también en el mediano y largo plazo, es un sistema judicial que pueda llevar a cabo procesar todos los casos que tiene que procesar. Eso tiene que estar acompañado de una estructura de inteligencia criminal que pueda llevar adelante estas investigaciones. También tendría que ver un despliegue de grupos especiales que permitan justamente ejecutar órdenes de allanamiento o detenciones que vaya emitiendo el Poder Judicial”según Serbin Pont.
Los ataques narcos responden, según el gobierno de Santa Fe, al endurecimiento de las condiciones de detención de los presos de alto perfil en las cárceles de la provincia. El gobernador santafesino busca terminar la construcción de una prisión de máxima seguridad y el martes difundió imágenes de presos tratados en un estilo que políticos y académicos acusan de ser una copia del que utiliza el presidente salvadoreño, Nayib Bukele.
Radio France Internacionale