En febrero del año pasado, el inservible y ahora extinto Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) reportó que no consiguió 27.9 millones de medicamentos y material de curación para ese año y 2024. Un año después, en una más de sus ocurrencias, Andrés Manuel López Obrador informó que se construiría una mega farmacia con todos los medicamentos del mundo para abastecer al país.
Antes que terminara 2023 fue inaugurado un cascarón denominado Megafarmacia del Bienestar y a casi un mes de su inicio de operación, Jens Pedro Lohmann Iturburu, director general de Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México (Birmex) y responsables del sitio, informó que se han surtido 67 recetas. Si, 67.
“Estamos atendiendo 523 folios, de esos 523 folios tenemos 292 que se están atendiendo de manera interna, es decir entre las instituciones o se está planeando la ruta tenemos, 164 que ya están en el lugar donde la persona solicitó el medicamento y tenemos 67 que han sido debidamente surtidas”, dijo.
De acuerdo con el informe oficial, fueron recibidas más de 12,000 llamadas, de las cuales, alrededor de 6,000 fueron ‘ficticias’ o no tuvieron interacción. Además, 4,000 llamadas fueron hechas sin que el interlocutor tuviera propiamente una receta, 523 folios fueron atendidos, de los cuales 292 se atienden internamente, 164 están en el lugar solicitado 67 fueron debidamente surtidas o sea, 5 recetas por día.
Esta ridiculez se une al aeropuerto lejano con el mínimo de vuelos y con uno o dos pasajeros, a un tren que desde su inauguración ha retrasado sus viajes y venta de boletos por diferentes fallas en vías, vagones, operación, etc. o una refinería que no ha refinado un solo barril de petróleo.
Sin embargo, esta ridiculez deja ver el tamaño del daño cuando nos damos cuenta del verdadero desabasto de medicamentos que vive nuestro país desde el inicio del sexenio.
Hace unos días, trabajadores de un hospital en la Ciudad de México, nos hicieron llegar un listado de al menos 85 medicamentos que actualmente están agotados, lo que genera implicaciones de riesgo a la salud para millones de pacientes en nuestro país.
Esta situación no es en un solo hospital, sino en varios de la capital y al interior del país. De acuerdo con la información recabada, los hospitales han informado a las farmacéuticas del desabasto y cuando representantes de esa industria farmacéutica tratan de negociar o surtir, no se los permite.
A esto se une una nueva agravante. Cuando finalmente se da una fecha de entrega, esta no se hace a la unidad médica correspondiente y ahora se deberá entregar en la megafarmacia, lo que implica mucho más tiempo.
Tuvimos oportunidad de hablar con un médico del Hospital La Raza, quien por motivos de seguridad nos pidió guardar su identidad.
¿Este desabasto de medicamentos en farmacias busca ‘obligar’ a hospitales y clínicas para beneficiar a la megafarmacia?
Si
¿De qué tamaño se prevé el impacto por el desabasto y la tardanza en las entregas? (Impacto a la salud – posibles muertes) (impacto económico-ventas)
Tenemos un mes sin medicamentos, que antes se surtían día a día”
3. La lista es únicamente de La Raza. ¿Se puede confirmar que todos los hospitales están en esa situación con listados similares?
Yo solo tengo información del CMN la raza, seguramente en otros hospitales estén igual ya que el objetivo es que los medicamentos lleguen a la mega farmacia y no a los hospitales.
Para diversos médicos con los que tuvimos comunicación, entre los riesgos de esta disposición están:
Recaídas en enfermedades como cáncer o diabetes
Resistencia por perder la continuidad de tratamientos
Mayor cantidad de transfusiones por pérdida de respuestas
Riesgos para hipertensos descontrolados y con riesgo de hemorragia cerebral
“No es cuestión de farmacia, abasto ni la unidad, son disposiciones centrales y federales (…) Y lo preocupante es que además de la escasez ahora ya no surtirán las farmacias de los hospitales sino la mega farmacia y obvio retrasa el que el paciente tenga su medicina a tiempo”, concluyó.