Actualmente, una práctica aparentemente inusual ha ganado popularidad en las redes sociales y se trata de aplicar alcohol en las paredes. Muchos internautas están usando este producto para el mantenimiento de sus espacios. Vale destacar que estas superficies no son muy fáciles de limpiar y cualquier imperfección se notará mucho más rápido cuanto más claro sea el color de la pintura.
Antes de comenzar, ten en cuenta que los acabados de pintura mate y satinada son los más delicados y requieren el toque más ligero. Los acabados de pintura brillante y semibrillante son más duraderos y pueden soportar un poco más de presión y limpiadores más fuertes. Te contamos cómo debes realizar para que tus paredes luzcan como recién pintadas.
¿Cómo limpio las paredes de mi hogar?
Si te has hecho la pregunta referida a la limpieza de tus paredes, te desvelamos un truco muy simple, económico y con pocos ingredientes. Lo primero que debes hacer es quitar el polvo. Puede ser difícil de ver, pero el polvo fino que se adhiere a las superficies puede hacer que incluso los colores de pintura más brillantes se vean sucios.
Para quitar las manchas de las paredes existen en el mercado varios productos químicos. Sin embargo, te ayudamos a economizar y a preparar una solución con tres ingredientes: un chorro de alcohol, una taza de agua y unas gotas de limón. Posteriormente, humedece un paño para frotarlo en la pared suavemente hasta que desaparezcan las marcas.
La mezcla de alcohol, agua y limón se ha convertido en una solución casera popular para combatir las manchas en las paredes del hogar. Esta mezcla combina la eficacia desinfectante del alcohol con el poder limpiador natural del limón junto con el agua. Esta solución es una opción ecológica que se ha ganado su lugar como un truco confiable para el mantenimiento de la pintura del hogar.