[ad_1]
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Cinco adolescentes se conocen en la secundaria y forman una pandilla que se mantiene intermitentemente a lo largo de su vida. Una historia de los noventa cuando todavía el celular y las redes sociales no era la forma de relacionarse. Cinco jóvenes que no se acomodan en ningún grupo, que los marginan o se sienten marginados y que la vida los va uniendo hasta convertirse en un grupo donde cada integrante juega un papel indispensable. El eje de la historia es Alejandro, un chico con una inestabilidad emocional que lo lleva a actuar impulsiva o extrañamente ocasionando severos problemas; su hermana es Sofía y Edith su amiga /novia que lo defiende a capa y espada al igual que a los del grupo; está la pequeña del grupo y el relajiento. Cada uno con su personalidad y un trabajo actoral diferenciado. Son cinco vidas, cinco historias entrañables que se entretejen a lo largo de la obra de una manera fragmentada y complementaria. Adrián Vázquez es el autor y director de “Los que sobran”, director también de la compañía Los Tristes tigres que actualmente están en residencia en el Foro Shakespeare con otras obras más.
La obra es energética de principio a fin. En constante movimiento tanto emocional como físico. Los personajes tienen momentos individuales y colectivos que suceden hasta que los pedazos se unen progresivamente. En medio de la alegría de estar juntos, de vivir aventuras cómicas o conflictivas, las historias están marcadas por la tragedia, la muerte, la injusticia. El autor insertadentro de esta luminosidad juvenil tremendos finales en donde los personajes en vez de diferenciarse se empatan y tienen un mismo destino trágico.
“Los que sobran” habla de la violencia y también del compañerismo. Está construida a partir de la narración de los acontecimientos en donde las acciones no son una descripción literal de lo narrado sino una recreación imaginativa y en movimiento. Las actrices y los actores, -entre los que resaltan Aldo Bringas, Valeria Acosta y Paula Zepeda-, responden al reto de una interpretación frenética y desbocada contrastándola con momentos de tensión, nostalgia y tristeza. Cada personaje tiene su forma de bailar, de hablar y de presentarse ante el público. Porque desde un inicio se dirigen a nosotros y representan los encuentros con uno u otro punto de vista. Los sucesos se van oscureciendo hasta llegar al clímax, cuando se rompe todo. Hay saltos de tiempo, hay cortes y diferencias de opinión respecto a un hecho; las narraciones se complementan o contrapuntean según las necesidades dramatúrgicas y de puesta en escena. Con apenas unas cuantas sillas, ubican espacios y lugares, distancias y cercanías. Las sillas se juntan y son una banca o encimadas una guarida. La luz caracteriza momentos al igual que la música.
“Los que sobran” ha tenido varias temporadas: en el Teatro NH en el 2017 y el Foro a Gruta en el 2018 con un elenco y en el Teatro Versalles (2023) y el Foro Shakespeare con nuevo elenco. Actualmente forma parte de la residencia en el Foro Shakespeare con obras todos los martes. En febrero presentaron “Los que sobran” y en marzo está “Dos en el camino” para después representar “Algo de un tal Shakespeare”. “Dos en el camino” trata de cuatro personajes que, a manera de monólogos narran su soledad y sus dificultades de encontrar pareja.
“Los que sobran” es una obra que nos hace reír y también conmovernos; recuerda un pasado y cuestiona un presente cargado de pérdidas y violencia.
[ad_2]
Source link