Sólo si se le reconoce como un bien social, en los espacios público y privado, en beneficio también de la niñez, es como se podrán abatir prácticas de violencia y se podrá erradicar, por ejemplo, la Discriminación Laboral por Embarazo (DLE), coincidieron especialistas.
Al participar en la mesa “La maternidad en el espacio laboral ¿Cómo romper la cadena de violencia hacia las mujeres embarazadas?”, organizada por El Heraldo TV y conducida por la periodista Blanca Becerril, la coordinadora de Vinculación e Incidencia en Políticas Públicas de Early Institute, Valeria González Ruiz y Denise Montesinos Pacheco, presidenta de Mujeres en Finanzas, señalaron que aunque hay avances en la inclusión, en diferentes ámbitos y niveles, aún resta mucho por hacer respecto a ese derecho.
“Lo cierto es que nos seguimos enfrentando a múltiples obstáculos como el de la discriminación […] por embarazo a la que se enfrentan día a día muchas […] que están laborando. El diagnóstico es claro: Son las condiciones de marginación, mal trato y ausencia de sensibilidad hacia la […] trabajadora […] las que impiden su desarrollo y crecimiento y es por eso que, de manera equivocada, la maternidad es considerada como una desventaja […] Ese entorno cultural es el que debemos modificar”, dijo.
Mencionó que un buen ejemplo de acciones encaminadas a conseguir este objetivo es la iniciativa presentada por la Diputada Julieta Vences, para incluir este tipo de discriminación laboral en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
Indicó que, desde distintos enfoques, es indispensable considerar a la maternidad, desde la gestación hasta la crianza, como un bien social que se extiende, no sólo hasta el derecho a ser madre, sino que debe ser entendido como el cuidado de hijas e hijos durante la Primera Infancia.
“Si […] no es vista como una prioridad, […] los esfuerzos que se realicen serán meros parches en las leyes o reglamentaciones. Es necesario que se ponga en el centro […], que se le preste una protección integral reforzada, que se tome en serio esta agenda de políticas públicas que tengan por objeto brindar una protección en todos los aspectos”, aseguró González Ruiz.
En ese contexto hizo un llamado a gobernadoras, gobernadores, senadores y diputados, a las contendientes que aspiran a la presidencia de la República, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, para que tomen en serio planearlas y ejecutarlas en beneficio de la maternidad y de la niñez mexicana.
Dijo que si se ha roto el techo de cristal para las mujeres, es necesario crearlas para la protección integral de la trabajadora embarazada y las que desean ser madres, porque los avances en este rubro son aún limitados.
“Eso en lo político, pero en el sector privado los empleadores tienen en sus manos cambiar esta situación, modificar la cultura de poner en el centro a la maternidad, como un bien […] que nos va a ayudar. Sí […] está protegida, si está reconocida, si está remunerada y si tiene acceso a la seguridad social nos va a ir bien a todos especialmente a nuestras niñas y niños”, subrayó.
Por su parte, Denise Montesinos, se pronunció por la generación de ambientes inclusivos y seguros de trabajo en los que se favorezca, sin limitante alguno, el derecho de la mujer a la maternidad, sin importar que tenga un rol o cargo importante en alguna empresa.
MMV