El sobrepeso y la obesidad en México son un problema que se presenta desde la primera infancia. Según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF por sus siglas en inglés), en el país, al menos uno de cada 20 niños y niñas mexicanos de entre 0 y 5 años y uno de cada 3 adolescentes tienen obesidad. Sin embargo, Abel Pavía, cardiólogo intervencionista, aseguró en conferencia de prensa, que la obesidad infantil puede comenzar incluso desde el vientre materno.
Pavía sostiene que la obesidad infantil puede comenzar desde el vientre materno debido a la epigenética, es decir, a los cambios que sufren los genes que se encuentran en el ADN de la madre a consecuencia de su mala alimentación.
Pero, ¿cómo ocurre esto?
De acuerdo con el experto, esto ocurre debido a la activación de una proteína que logra entrar al ADN de las personas gestantes y el cual se trasmite al bebé mediante los genes.
“En el cuerpo hay un grupo de proteínas dentro de las células que se quedan atrapadas en el citoplasma, por lo que están inhibidas. Cuando esas proteínas se liberan porque el citoplasma ya no existe, entonces se meten al núcleo de la célula que es donde está el ADN. Ahí se expresan y forman otras proteínas y todas esas proteínas lo que hacen es enfermar. Por eso, es que los sistemas biológicos para ser sanos son inhibidos”.
Abel Pavía, cardiólogo intervencionista
Según el especialista, dado que las proteínas ya se encuentran expresadas en los genes del ADN de la madre, estos se pasan al niño con la misma información, es decir, el gen se encuentra ya abierto y no inhibido, lo que indica una predisposición a padecer obesidad y otras enfermedades metabólicas y cardiovasculares como diabetes o hipertensión.
“Si en las primeras etapas de vida el niño sigue consumiendo carbohidratos lo único que tiene que hacer es acumular la grasa, para formar una molécula de triglicéridos”, mencionó Pavía.
Por ello, el especialista y miembro del Colegio Americano de Cardiología, recordó la importancia de tener una buena alimentación durante el embarazo, pues “de esta manera los genes pueden quedar inactivos y entonces no se expresen y no haya síndrome metabólico”.
“Si la alimentación de la madre mientras está en gestación es mala, entonces los niños van a tener síndrome metabólico, y eso es lo que explica por qué en México la obesidad infantil es tan importante”, dijo el experto.