Estos son los cambios más notorios de envejecimiento, según expertos

Estos son los cambios más notorios de envejecimiento, según expertos


A medida que las personas envejecen, su edad se va haciendo notoria por determinados factores que acompañan el paso del tiempo. En ese sentido, aparecen dolencias, hay cambios de humor, de vestimenta e incluso actividades de ocio. Sin embargo, hay ciertos aspectos de nuestro cuerpo que reflejan de manera notoria el envejecimiento.

Una de las mayores diferencias que llegan con la edad es el cambio en el color y la apariencia de las uñas y el cabello, que sufren por el agotamiento de componentes como colágeno o melanina. Estos dos elementos del cuerpo humano, experimentan cambios a medida que una persona envejece. Ellos son parte natural del proceso de envejecimiento y afectan tanto el color como el grosor de estos elementos. 

La aparición de canas es uno de los símbolos de envejecimiento. Fuente: Pinterest

¿Por qué se producen esos cambios?

Vale destacar que el color del cabello es uno de los signos más obvios de envejecimiento. Ello se debe a un pigmento llamado melanina, que producen los folículos pilosos. Estos últimos son estructuras en la piel que producen y permiten el crecimiento del pelo, pero, con la edad, empiezan a producir cada vez menos melanina, lo que da paso a las canas de color gris o blanco, que reemplazan este pigmento.

Generalmente, el cabello empieza a encanecer en las sienes y se extiende hacia la parte superior del cuero cabelludo. El color se torna cada vez más claro y finalmente blanco. Asimismo, el vello corporal y facial también se vuelve gris, por eso los adultos mayores tienen, generalmente, las cejas, barba o bigote del mismo color de sus canas, aunque suele haber excepciones. La diferencia con el proceso de caída normal del cabello cuando se llega a una edad avanzada es que este tiende a caerse mucho más frecuentemente, y la velocidad de crecimiento no es tan acelerada como en la juventud.

Las uñas se vuelven frágiles y en algunos casos, amarillentas. Fuente: Pinterest

Otro de los signos de la edad se manifiesta en las uñas, crecen  más lentamente, se vuelven pálidas y frágiles. En algunos casos, pueden volverse amarillentas y duras y las uñas encarnadas pueden ser más comunes. También es posible que aparezcan rebordes longitudinales en las de las manos y los pies. 



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