Kamala Harris brincó del lugar número dos al asiento principal del Partido Demócrata este domingo, cuando el presidente Joe Biden se retiró de la contienda y le mostró su apoyo para buscar la Presidencia de Estados Unidos.
Si es la candidata, Harris, de 59 años, se convertiría en la primera mujer negra en encabezar la boleta de un gran partido en la historia de Estados Unidos.
Exfiscal general de California y exsenadora de Estados Unidos, se presentó sin éxito a las primarias presidenciales contra Biden en 2020.
Los índices de aprobación de Harris, aunque bajos, son ligeramente superiores a los de Biden.
Como vicepresidenta ha estado profundamente involucrada con la agenda de gobierno de Joe Biden.
El 8 de junio de 2021 visitó Palacio Nacional para hablar sobre temas migratorios.
Fue recibida por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que le dijo: ‘Presidente Kabala, mucho gusto’.
En un encuentro calificado como “muy exitoso”, analizaron cómo mitigar la migración indocumentada hacia el norte.
“Concluye reunión del Presidente López Obrador y la Vicepresidente Kamala Harris. Se abordaron la economía y el diálogo de alto nivel, cooperación para la seguridad, desarrollo en el sur de México y Centroamérica”, escribió en Twitter el entonces el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
“Fue un encuentro muy exitoso”.
Ambos gobiernos buscan mejorar las condiciones de vida en los países del Triángulo Norte de Centroamérica desde donde, cada año, miles de migrantes huyen de la violencia y pobreza con la intención de internarse en Estados Unidos.
El gobierno de Joe Biden se comprometió a fomentar la inversión en el sur de México, incluidos préstamos para vivienda asequible, apoyo para fortalecer las cadenas de valor rurales en cacao, café y ecoturismo, y misiones de desarrollo comercial y empresarial para apoyar proyectos de infraestructura.
Ambos líderes acordaron aumentar la cooperación para asegurar aún más su frontera de casi 3,200 kilómetros y garantizar una migración ordenada.
