MADRID (EUROPA PRESS).- El exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas habría sido hospitalizado este lunes debido a lo que diversas fuentes citadas por medios ecuatorianos achacan a una sobredosis de medicamentos.
Las autoridades no han dado ninguna información oficial y las versiones varían desde que está en coma a que ha regresado ya a la cárcel de La Roca de Guayaquil, donde se encuentra desde que el viernes fuera asaltada la Embajada de México en la que se refugiaba.
Una de las versiones publicada por el diario ‘El Universo’ cita fuentes del Hospital Militar que sostienen que Glas recibió en el centro sanitario “primeros auxilios”.
“Fue rápido y de aquí salió”, han señalado trabajadores del hospital.
El líder del movimiento político Revolución Ciudadana (RC) y presidente durante el mandato de Glas, Rafael Correa, comentó en su cuenta en X la noticia publicada por varios medios ecuatorianos. “Era lo que temía. Los canallas saltarán de alegría. ¡Fuerza, Jorge! #LosCorruptosSiempreFueronEllos”, publicó.
Era lo que temía. Los canallas saltarán de alegría.
¡Fuerza, Jorge!#LosCorruptosSiempreFueronEllos https://t.co/vYpiqMadyN— Rafael Correa (@MashiRafael) April 8, 2024
Otros medios como Radio Pichincha señalan que fuentes cercanas a Revolución Ciudadana afirman que Glas está estable tras un cuadro de intoxicación por los medicamentos que ingirió por un dolor de columna.
Según estas fuentes, Glas no respondía a estímulos tras una primera evaluación médica en prisión y por ello fue trasladado al Hospital Militar y posteriormente al Hospital Naval.
Desde el diario ‘Primicias’ apuntan a una ingesta intencionada e indebida de medicamentos ansiolíticos, antidepresivos y sedantes, según un informe policial al que ha tenido acceso el periódico.
“Se presume el diagnóstico de coma profundo autoinducido provocado por la ingesta de medicamentos ansiolíticos, antidepresivos y sedantes”, señala el informe policial citado por ‘Primicias’.
Glas estaba internado en la cárcel de máxima seguridad La Roca de Guayaquil tras ser capturado el pasado viernes en una incursión de policías y militares en la Embajada mexicana en la que se encontraba refugiado.