Las ojeras son uno de los problemas estéticos más comunes y universales, pues éstas no discriminan por edad, género o estilo de vida. Ya sea por noches de insomnio, estrés laboral, factores genéticos o simplemente por el paso del tiempo, las ojeras pueden aparecer y persistir, dando al rostro una apariencia de cansancio y envejecimiento prematuro. Y si bien, nadie puede jactarse de tener una piel perfecta, también es válido buscar opciones para hacerlas menos evidentes.
Es así como la industria del maquillaje y la cosmética ha desarrollado múltiples técnicas y productos para combatir este problema ya que además de los múltimples tratamientos cosméticos para atenuar las ojeras, también se ha descubierto que las tonalidades de ciertos correctores pueden llegar a ocultar hasta las ojeras más oscuras, sólo es necesario identificar cuál de ellas te aqueja para poder actuar.
Y es que maquillistas expertas han descubierto que la famosa Teoría del Color funciona como una técnica infalible para ocultar las ojeras mientras el tratamiento cosmético que hayas elegido para eliminarlas por completo hace efecto; aunque ésto pueda parecer muy complicado, en realidad es bastante sencillo y no necesitas gastar grandes cantidades de dinero en maquillaje costoso, pero hay algunos trucos que debes conocer.
Comprendiendo las ojeras: ¿qué son y por qué aparecen?
Antes de abordar las soluciones, es fundamental entender qué son las ojeras y cuáles son sus causas. De acuerdo con expertas en el cuidado de la piel, las ojeras se manifiestan como una decoloración oscura o pigmentación debajo de los ojos, y pueden ser el resultado de una combinación de factores tales como:
- Genética: algunas personas están predispuestas a tener ojeras debido a la genética. Si tus padres las tienen, es probable que tú también.
- Edad: con el envejecimiento, la piel se vuelve más delgada, lo que hace más visibles los vasos sanguíneos y las estructuras óseas debajo de los ojos.
- Falta de sueño y fatiga: la privación de sueño puede hacer que la piel se vea pálida, lo que permite que la sangre oscura debajo de la piel se vea más prominente.
- Alergias y congestión nasal: pueden dilatar los vasos sanguíneos y oscurecer la zona bajo los ojos.
- Exposición al sol: aumenta la producción de melanina, el pigmento que da color a la piel, lo que puede oscurecer las ojeras.
- Deshidratación: la falta de agua hace que la piel debajo de los ojos se vea opaca y hundida.
Y aunque este es un problema que aqueja a miles de personas alrededor del mundo, no todas las ojeras se ven iguales ya que éstas pueden variar en color y aspecto, por lo que resulta escencial conocer cuál de ellas se encuentra en tu pial para así encontrar las tonalidades perfectas para disimularlas con maquillaje. Las ojeras pueden verse de las siguientes formas:
- Ojeras azules: indican una mala circulación sanguínea ya que la piel fina debajo de los ojos deja ver los vasos sanguíneos.
- Ojeras moradas: pueden deberse a factores genéticos o a la oxidación de la hemoglobina.
- Ojeras marrones: resultan de la hiperpigmentación, común en personas de piel más oscura o por exposición al sol.
- Ojeras rojas: asociadas con irritación o alergias que inflaman los vasos sanguíneos.
- Ojeras verdes o amarillas: pueden ser resultado de una combinación de pigmentación y visibilidad de vasos sanguíneos.
¿Cómo usar la Teoría del Color para cubrir las ojeras con maquillaje?
Aunque parezca extraño, la Teoría del Color es una herramienta invaluable en el mundo del maquillaje, especialmente al corregir imperfecciones como las ojeras ya que el círculo cromático muestra cómo los colores interactúan entre sí. Los colores opuestos en el círculo cromático se neutralizan mutuamente y esta es la base para el uso de correctores de color, pues al aplicar un color complementario sobre una tonalidad indeseada, se neutraliza el tono, creando una base uniforme.
Es por ello que los correctores vienen en diversos tonos para contrarrestar diferentes imperfecciones y resulta importante usarlos de manera adecuada para lograr el efecto deseado. Sabiendo esto, te dejo una guía muy sencilla para que una vez que hayas identificado la tonalidad que tienen tus ojeras, encuentres el producto adecuado para ti.
Ojeras azules o moradas
- Corrector naranja o salmón: resulta que el naranja es el color complementario del azul; de la misma forma los tonos salmón funcionan bien para neutralizar tonos azules en pieles claras, mientras que los naranjas más intensos son mejores para pieles más oscuras.
Ojeras marrones
- Corrector melocotón o rosado: por su parte, los tonos melocotón o rosados ayudan a iluminar y contrarrestar la pigmentación marrón.
Ojeras rojas
- Corrector Verde: de acuerdo con el círculo cromático, el color verde es capaz de neutralizar el rojo, lo que lo convierte en la tonalidad ideal para cubrir rojeces e irritaciones.
Ojeras verdes o amarillas
- Corrector lila o lavanda: finalmente, estos tonos equilibran los tonos amarillentos o verdosos, aportando luminosidad al área.
El paso a paso para cubrir las ojeras con maquillaje
Una vez que tengas los productos que se adaptan a la tonalidad de tus ojeras, antes de pasar al maquillaje primero deberás preparar tu piel para lo que viene. Un paso escencial es lavar tu rostro con un limpiador suave para eliminar impurezas; después aplica una crema hidratante específica para el contorno de ojos ya que la piel hidratada evita que el corrector se asiente en líneas finas y si tienes la posibilidad (o quieres hacerlo) aplica un primer de ojos, pues aunque es opcional ayuda a alisar la piel y prolongar la duración del maquillaje. Ahora sí, comienza el maquillaje:
Aplicación del corrector de color
Para este paso no debes olvidar que menos es más, por ello aplica una pequeña cantidad del corrector de color en la zona oscura. Utiliza el dedo anular para aplicar suavemente el producto, ya que éste ejerce menos presión sobre la piel delicada, aunque también puedes usar una brocha de cerdas sintéticas y difumina los bordes para que el corrector se funda con la piel.
Aplicación del corrector del tono de piel
Después, elige un corrector que coincida con tu tono de piel o ligeramente más claro para iluminar y aplícalo sobre el corrector de color ya difuminado. Para difuminar esta nueva capa usa una esponja de maquillaje húmeda, ésta te ayudará a lograr un acabado natural.
Sellado del maquillaje
Una vez que ambos correctores hayan quedado en su lugar, con una brocha pequeña aplica suavemente un polvo translúcido para fijar el corrector; recuerda evitar el exceso ya que demasiado polvo puede resecar el área y acentuar las líneas de expresión. Si quieres, también puedes aplicar un iluminador líquido en la parte superior del pómulo y en el lagrimal para dar luminosidad; pero además de esto hay algunos trucos extra que puedes aplicar para disimular tus ojeras por completo:
- Evita productos pesados ya que pueden asentarse en líneas finas y arrugas.
- Cuidado con los reflectores: algunos correctores tienen partículas reflectantes que pueden resaltar las ojeras bajo ciertas luces como las que tienen los flashes.
- Cada piel es diferente por lo que las expertas recomientan experimentar con diferentes tonos y texturas para encontrar lo que mejor funcione para ti.
- Aplica capas finas y construye la cobertura según sea necesario.
- Expertas recomiendan buscar un corrector con los siguientes ingredientes para así ayudar también con el cuidado de la piel: vitamina E (ayuda a hidratar y proteger la piel); ácido hialurónico (mantiene la hidratación y rellena líneas finas); cafeína (reduce la hinchazón y mejora la circulación; antioxidantes (protegen la piel de los radicales libres).
¿Cómo evitar las ojeras de forma natural?
Para evitar las ojeras de forma natural, es esencial llevar una rutina de sueño adecuada y cuidar la hidratación del cuerpo, por lo que dormir entre 7 y 9 horas cada noche permite que el organismo se recupere y evita que la piel luzca cansada. Mantenerse hidratada, bebiendo al menos 8 vasos de agua al día, también ayuda a que la piel se vea más firme y menos opaca ya que una buena hidratación evita la retención de líquidos, que puede causar hinchazón y oscurecimiento bajo los ojos.
De la misma forma, incluir algunos remedios caseros en la rutina diaria también puede hacer una diferencia por lo que aplicar compresas frías, como cucharas refrigeradas o rodajas de pepino, sobre los ojos durante 10 o 15 minutos, ayuda a reducir la hinchazón y mejora la circulación en la zona. Las bolsas de té verde o manzanilla frías son una alternativa efectiva, ya que contienen antioxidantes y propiedades antiinflamatorias que alivian la pigmentación. Además, el uso de aceites naturales como el de almendra o coco, aplicados en un suave masaje antes de dormir, hidrata y aclara la piel con el tiempo.
Por último, proteger la piel del sol y mantener una dieta equilibrada son factores clave, ya que la exposición al sol sin protección puede intensificar la pigmentación de las ojeras, por lo que es recomendable usar protector solar y gafas de sol. Consumir alimentos ricos en vitamina C y vitamina K, como cítricos, espinacas y frutos rojos, fortalece la piel y reduce las ojeras; y al evitar el estrés y realizar ejercicio regularmente, mejoramos la circulación y logramos una apariencia más descansada y saludable.
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