El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó recientemente una histórica propuesta liderada por México y Gambia, con el respaldo de 99 países, para negociar una convención internacional que busque prevenir y sancionar los crímenes de lesa humanidad.
La resolución, adoptada por la Sexta Comisión de la Asamblea General de la ONU, marca un hito en el derecho internacional, al convocar a una conferencia de plenipotenciarios que se llevará a cabo en 2028.
Este acuerdo internacional tiene el objetivo de crear un marco jurídico más robusto para enfrentar estos crímenes, que aún representan una de las más grandes afrentas a la humanidad.
El proceso, que fue arduo y se extendió por varios meses de negociación, culminó en un consenso global en el que participaron naciones de todos los continentes.
La resolución responde a una recomendación realizada por la Comisión de Derecho Internacional (CDI) en 2019, la cual instó a la Asamblea General de la ONU a tomar medidas en este sentido.
La propuesta de México, que asumió el liderazgo junto con Gambia, subraya la urgencia de erradicar la impunidad relacionada con crímenes de lesa humanidad y crear un sistema judicial internacional más efectivo y accesible.
México, que ha sido un defensor del multilateralismo y la justicia internacional, destaca la relevancia de cerrar una brecha de 75 años en el derecho internacional respecto a los crímenes de lesa humanidad.
En un comunicado emitido por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), se subrayó que la resolución adoptada no solo representa un avance en términos legales, sino también en la reafirmación de la capacidad de las Naciones Unidas para responder a desafíos globales mediante la diplomacia multilateral.
La convención que se buscará negociar en los próximos años abordará temas cruciales, tales como la responsabilidad penal de los perpetradores de crímenes de lesa humanidad y las medidas preventivas que deben implementarse a nivel global para evitar que tales atrocidades sigan ocurriendo.
En particular, la conferencia de plenipotenciarios, que se celebrará entre 2028 y 2029, marcará el inicio de un proceso formal para definir los detalles de este acuerdo internacional que podría cambiar la forma en que se enfrentan estos crímenes en el escenario global.