Los pescados y mariscos son opciones importantes en la alimentación debido a la proteína que aportan. Hay diversidad de maneras de prepararlos para conquistar a cualquier paladar; una de las opciones que nunca pasa por alto es la de pescaditos capeados. Lo mejor es recurrir a una receta que te permita tener un platillo crujiente, y eso haremos hoy.
En la cocina hay grandes secretos que hacen que un platillo pase de ser bueno a extraordinario. Los pescaditos capeados son de esas opciones que requieren de trucos porque su preparación hace la diferencia y eso se nota al momento de servirlos, verlos y masticárlos, sintiendo una textura única.
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Cómo hacer pescaditos capeados
Lo primero es elegir pescado de calidad, y para ello se recomienda seguir las recomendaciones de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco). Igual es conveniente acudir a pescaderías que ofrecen productos frescos, ya que así se cuida la salud y es más fácil marinar o sazonar.
Ingredientes
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1 cucharadita de polvo para hornear
- 1 cucharadita de sal al gusto de pimienta suficiente de agua mineral
- 2 tazas de harina de trigo
- Agua mineral
- 2 tazas de pescado en tiras
- 1/4 de taza de jugo de limón al gusto
- Sal
- Pimienta
Paso a paso
- En un bowl o recipiente profundo, mezcla los ingredientes en polvo; sazona al gusto con la sal y pimienta.
- Agrega el agua mineral y mezcla hasta obtener una textura libre de grumos.
- Marina los pescaditos con el jugo de limón de limón y sal y pimienta; permite que las piezas de pescado absorban los sabores al menos durante 10 minutos; este paso es vital.
- Pieza por pieza, sumerge los pescaditos en la mezcla; es importante que queden totalmente cubiertos.
- Fríe en aceite previamente caliente, ya que esto facilitará el proceso, obteniendo pescaditos capeados crujientes.
Está receta es ideal para los días de primavera y verano, lo que coincide con la Cuaresma. Para tener una comida completa, acompaña las piezas de pescado con ensalada, arroz y frijol o con aquello que gustes.