El éxito en todos los ámbitos es algo a lo que todos aspiran, pero ¿cómo se alcanza realmente? Contrario a lo que muchos piensan, no es solo fruto del talento o la suerte. El experto Ronald E. Riggio expuso en un artículo de Psychology Today que investigaciones psicológicas confiables sugieren que adoptar ciertas mentalidades puede ser clave para lograr nuestras metas.
Una de ellas es el poder del refuerzo positivo. Riggio sostiene que las recompensas incrementan la probabilidad de repetir un comportamiento deseado. Entonces, ¿por qué no aplicar este principio a nosotros mismos? Al alcanzar un objetivo para llegar al éxito, celebrarlo de manera significativa puede ser mucho más efectivo que castigarnos por los errores. Imagina premiarte con un pequeño lujo, una llamada a un ser querido, o simplemente un momento de descanso. Estas acciones no solo nos motivan a seguir adelante sino que fortalecen nuestra resiliencia ante los desafíos.
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¿Cómo conseguir el éxito?
Ronald explica que la mentalidad de crecimiento, un concepto popularizado por la psicóloga Carol Dweck, nos enseña a ver cada experiencia como una oportunidad de aprendizaje. Desde situaciones nuevas hasta errores aparentes, cada momento puede ofrecernos valiosas lecciones.
Realizar una “revisión después del acontecimiento” nos permite reflexionar sobre nuestras experiencias y descubrir cómo podemos aplicar ese conocimiento en el futuro. Esta práctica no solo enriquece nuestro desarrollo personal sino que también nos prepara mejor para enfrentar futuros retos.
Y refiere que la productividad no se trata solo de hacer, sino de hacer bien. Es la capacidad de alcanzar objetivos manteniendo una alta calidad en los resultados. Para ser verdaderamente productivos, necesitamos crear un entorno que promueva esta mentalidad, estableciendo objetivos claros y recompensándonos por los logros intermedios. Pero también requiere de un equilibrio y reconocer la importancia del tiempo para nosotros mismos y para quienes nos rodean.
¿Qué hacer para alcanzar el éxito en la vida?
Riggio también menciona que la resiliencia ayuda a ver los factores estresantes no como barreras insuperables, sino como retos a vencer para conseguir nuestras metas. Esta reconfiguración de la percepción convierte la adversidad en un motor de crecimiento, impulsándonos a buscar soluciones creativas y a no rendirnos ante la presión.
Finalmente, se tiene que crecer en la capacidad de uno mismo para lograr las cosas. Si confiamos en nuestra capacidad para tener éxito y mantenemos una actitud positiva, no solo mejoraremos nuestro propio rendimiento sino que también influenciaremos positivamente a quienes nos rodean.