Así puedes refrescar a tu gato durante una ola de calor

Así puedes refrescar a tu gato durante una ola de calor


Con el incremento de las temperaturas, los gatos, al igual que otros animales, pueden sufrir graves consecuencias debido al calor extremo. Estos felinos, especialmente aquellos con pelaje denso, son susceptibles a problemas como el golpe de calor, la deshidratación y el agotamiento. A diferencia de nosotros, estos animales no poseen un sistema de regulación térmico que les permita transpirar como en nuestro caso.

En ese sentido, los dueños de mascotas, deben proporcionarles un ambiente fresco, agua en abundancia y evitar la exposición al sol durante las horas pico. Te revelamos algunos consejos para que tu gato no pase calor en esta época.

Mantén frescos los ambientes de tu hogar con el ventilador o aire acondicionado. Fuente: Pinterest

Consejos para refrescar a tu mascota

Es importante que tu gato cuente con un bebedero con agua limpia y fría, inclusive puede tener hielos, para evitar la deshidratación en esta época de calor. Otro truco es la toalla mojada y fresca, ideal para mojar el pelaje de tu felino. Vale recordar que  estos animales odian mojarse y por ello, una táctica ideal es usar la toalla para refrescarle la cabeza y por el resto del cuerpo: patitas, las axilas, la panza y debajo de la barbilla. Estas son zonas en las que es más fácil bajar su temperatura corporal, provocando así un agradable efecto refrescante.

Es importante que en tu casa existan zonas de sombra y de descanso cerca del aire acondicionado o del ventilador. Otro buen truco para aliviar el calor de esta época es preparar una caja de cartón cubierta con una toalla húmeda. En su interior puedes aprovechar para dejar un calcetín con varios hielos en su interior, lo que será un espacio ideal para que tu gato no sufra de estas temperaturas tan altas.

Es importante la hidratación de tu mascota. Fuente: Pinterest

Si cuentas con un jardín o terraza en tu hogar, puedes colocar una piscina de plástico. Llénala con un poco de agua fresca, pero nunca con demasiada agua, ya que tu gato tiene que poder hacer pie en la piscina y encontrarse cómodo y seguro en ella. Aplica todos estos consejos para evitar un posible golpe de calor de tu mascota.



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