El expresidente de Colombia Álvaro Uribe denunció este miércoles que la reciente imputación de la Fiscalía por los presuntos delitos de manipulación de testigos y fraude procesal no es más que “una venganza política”.
“Este juicio lo adelantan por presunciones políticas, por venganzas políticas, sin pruebas de que yo buscaba sobornar testigos”, aseguró el exmandatario colombiano en un vídeo compartido en su perfil oficial en redes sociales.
Asimismo, Uribe expresó sus dudas sobre que esta “manipulación” en su contra se produzca en un momento en que el Gobierno colombiano impulsa el denominado ‘plan de paz’ para poner fin al enfrentamiento con grupos armados.
En este punto, el expresidente especuló con que el plan del Gobierno de Gustavo Petro pasa por justificar el perdón a los integrantes de grupos armados -“como ya hicieron con las FARC”- con “la ficción de perdonar a quienes no hemos delinquido”.
Por otro lado, Uribe arremetió contra la fiscal general de Colombia, Luz Adriana Camargo, y la vinculó directamente con el ministro de Defensa, Iván Velásquez, con quien reconoce no guardar buena relación.
La Fiscalía General de Colombia anunció en la víspera que llamará a juicio al expresidente Uribe por los presuntos delitos de manipulación de testigos y fraude procesal, una investigación por la que el exmandatario ya asumió hace meses que sería juzgado.
El Ministerio Público subrayó que no solicitará una orden de captura contra el exmandatario que, por tanto, podrá defenderse en condición de libertad en el juicio oral para el que aún no se conoce fecha, según informaciones recogidas por RCN Radio.
Uribe ya informó en octubre del año pasado que las autoridades del país se negaron a archivar el proceso abierto en su contra por la presunta manipulación de testigos y adelantó que en algún momento sería llevado a juicio.
El caso comenzó en 2012 cuando Uribe denunció al senador Iván Cepeda, asegurando que este recorrió las cárceles del país para presentar falsos testimonios en su contra sobre el surgimiento del paramilitarismo en la región de Antioquia.
Sin embargo, varias versiones apuntaron que los abogados del expresidente buscaban manipular a testigos para que apuntaran a Cepeda, por lo que este último pasó de acusado a víctima, al contrario que Uribe, demandante, que se convirtió en investigado.