La carne de pollo es uno de los alimentos más consumidos en México y el mundo entero, pero este producto animal está generando controversias por la cantidad de enfermedades que puede transmitir. Recientemente el Síndrome de Guillain-Barré causó dos muertes en Tlaxcala y con esto la alerta sobre otras enfermedades que pueden transmitirse a través del consumo de esta proteína.
Si bien, el pollo tiene muchos beneficios para el cuerpo, se debe tratar con cuidado, ya que puede representar un riesgo para la salud al contar con una gran cantidad de enfermedades si no se limpia o se cocina de manera adecuada. Mejor vamos a presentar cuáles son las otras posibles enfermedades que tiene este alimento tan común en la cocina.
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Enfermedades que se pueden transmitir la carne de pollo
La carne de pollo puede estar contaminada por diferentes bacterias, virus y parásitos, por lo que se debe tener en cuenta su adecuada cocción y limpieza antes de consumirlo. Ahora vamos a revelar alguna de las enfermedades que se pueden contagiar en caso de no tener los cuidados necesarios con el pollo.
- Listeria
- Salmonelosis
- Campylobacter
- Yersinia
- E coli
- Gripe aviar
Si bien existen otras enfermedades que están relacionadas con las aves, estás son las más comunes que se pueden presentar cuando se consume la carne de pollo u otro tipo de aves que estén infectadas con alguna bacteria o virus. Existen otras enfermedades que están relacionadas con el contacto del animal o con sus heces.
Cuidados para el consumo del pollo
Para evitar este tipo de enfermedades, además, del ya mencionado, Síndrome de Guillain-Barré, es que se debe cocinar a una temperatura adecuada (70ºC). Se debe de limpiar este producto animal antes de consumirlo para eliminar algunas de las bacterias que se encuentran en la capa superficial de la carne, pero nunca lavarlo, ya que esto puede llevar los agentes infecciosos a otras zonas de la cocina o alimentos.
Se debe utilizar una tabla diferente para cortar y utensilios de cocina especiales el pollo crudo y otra para el resto de los alimentos. Otro punto que se debe tener en cuenta es donde se compra, ya que este tipo de proteína debe pasar por una serie de controles de sanidad.