Los precios del petróleo subían el lunes tras el recrudecimiento de los enfrentamientos entre Rusia y Ucrania durante el fin de semana, aunque la preocupación por la demanda de combustible en China y las previsiones de un superávit mundial de crudo frenaban a los mercados.
Al inicio de la jornada los futuros del Brent subían 55 centavos, o un 0.8%, a 71.59 dólares el barril, y los del West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI) ganaban 43 centavos, o un 0.6%, a 67.45 dólares.
Rusia desató el domingo su mayor ataque aéreo contra Ucrania en casi tres meses, causando graves daños al sistema eléctrico del país.
En un giro significativo de la política de Washington en el conflicto entre Ucrania y Rusia, el gobierno del presidente Joe Biden permitió que Kiev utilice armas de fabricación estadounidense para realizar ataques profundos contra Rusia, dijeron el domingo dos funcionarios estadounidenses y una fuente conocedora de la decisión.
El Kremlin afirmó el lunes que cualquier decisión de este tipo significaría la implicación directa de Estados Unidos en el conflicto y acusó al gobierno de Biden de escalar la guerra.
“Si Biden permite que Ucrania ataque a las fuerzas rusas en torno a Kursk con misiles de largo alcance, es posible que vuelva a haber una apuesta geopolítica por el petróleo, ya que se trata de una escalada de las tensiones allí, en respuesta a la entrada en liza de las tropas norcoreanas”, dijo Tony Sycamore, analista de mercados de IG.
Saul Kavonic, analista de energía de MST Marquee, dijo: “Hasta ahora ha habido poco impacto en las exportaciones rusas de petróleo, pero si Ucrania ataca más infraestructuras petrolíferas, los mercados del crudo podrían elevarse aún más”.
El Brent y el WTI cayeron más de un 3% la semana pasada por los débiles datos de China y después de que la Agencia Internacional de la Energía pronosticara que la oferta petrolera mundial superará la demanda en más de 1 millón de barriles por día en 2025, incluso aunque se mantengan los recortes de producción de la OPEP+.