Cientos de miles de personas se manifestaron el martes en Buenos Aires, la capital de Argentina, en favor de la universidad pública y contra la falta de financiamiento de estos centros por parte del Gobierno del ultraliberal Javier Milei, en lo que se ha convertido en la movilización más grande en su contra hasta el momento.
A la manifestación asistieron partidos políticos opositores, sindicatos y organizaciones sociales, incluidos líderes y altos cargos las mismas, y que acabó en la Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada, sede del Gobierno.
Mientras que la Policía cifró en 150 mil los asistentes, los organizadores de la protesta aseguraron que han sido más de medio millón; en la ciudad de Córdoba han protestado más de 50 mil personas, y en Mendoza, unos 20 mil 000, si bien ha habido otras movilizaciones “masivas” en Mar de Plata y en Rosario, según el diario argentino Clarín.
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Las movilizaciones, que tuvieron lugar sin incidentes, fueron convocadas por el Consejo Interuniversitario– integrado por representantes de los consejos directivos de las 66 universidades de públicas-, el Frente Sindical de Universidades Nacionales y la Federación Universitaria Argentina.
“Llegamos a marzo de 2024 con un presupuesto de gastos a valores de septiembre de 2022. El incremento del 70 por ciento de estas partidas, dispuesto para el mes de marzo y aún no abonado, más el reciente anuncio, en el marco de esta convocatoria, de un 70 por ciento adicional, constituyen un aliciente aún insuficiente en tanto la inflación fue de un 300 por ciento en el mismo período de tiempo“, comunicaron los convocantes.
La Universidad de Buenos Aires (UBA), una universidad gratuita donde se formaron cinco premios Nobel y 17 presidentes, señaló que el Gobierno prácticamente congeló su presupuesto a pesar de que el país registró una inflación del 287.9% en el último año.
Estas protestas se convocaron bajo el mandato de Milei, quien asegura que las universidades públicas “adoctrinan” y llegó a poner en duda la transparencia en materia financiera de las mismas tras asegurar que no se someten a auditorías.
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“Un país que no invierte en ciencia renuncia a su soberanía“, dijo en el cierre del acto Piera Fernández, titular de la Federación Universitaria Argentina (FUA).
“Todos los problemas que tenemos se solucionan con más educación y más universidad pública“, enfatizó y señaló que “la educación nos salva y nos hace libres. Convocamos a la sociedad argentina a defenderla”.
La Universidad de Buenos Aires, que se ubica entre las 100 mejores del mundo según el ranking QS y tiene 110 carreras de grado, seis colegios secundarios y cinco hospitales públicos, denunció que el recorte en el presupuesto está afectando el dictado de clases, la investigación y la atención sanitaria.
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Durante su campaña electoral, el ultraderechista Milei prometió aplicar la “motosierra” para recortar el gasto público y lograr el equilibrio fiscal en medio de una severa crisis económica, mientras que en las últimas semanas ha repetido que las universidades públicas son sitios de adoctrinamiento “socialista” para justificar la reducción presupuestaria.
Pero la universidad pública y gratuita es una de las instituciones con mayor reconocimiento entre los argentinos, que coparon decenas de calles del centro de Buenos Aires y de las principales ciudades del país con banderas de Argentina y eslóganes en defensa de la educación como “La UBA no se vende” y “Defendamos la ciencia”.
“Vengo para defender la universidad pública y porque mis principios están muy alejados de los del Gobierno actual“, dijo a Reuters Pedro Palm, un arquitecto de 82 años graduado en la UBA.
“Vamos a tener que dejar de funcionar (…) Actualmente estamos aproximadamente un 60, 70% por debajo del presupuesto que nos venían dando”, dijo a la emisora local Radio Rivadavia Ricardo Gelpi, rector de la prestigiosa UBA, que cuenta con más de 300 mil alumnos.
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En un intento por limitar los alcances de la protesta -que se reprodujo en otras importantes ciudades del país-, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, defendió al Gobierno.
“La educación es uno de los pilares fundamentales de nuestra ideología. Lejos estamos de querer cerrar las universidades“, destacó en una conferencia de prensa por la mañana, en la que añadió que el Gobierno tampoco prevé arancelar la educación universitaria.
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La manifestación, a la que adhirió la Confederación General del Trabajo (CGT) -la principal central sindical del país- junto a otras asociaciones gremiales, atravesó el centro de la ciudad de Buenos Aires para concluir alrededor de las 19:00 hora local con un acto en la histórica Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno.
(Con información de Europa Press y Reuters)