CIUDAD DE MÉXICO (apro).- “Estamos en alerta, pero la vida tiene que seguir”, dijo el empresario mexicano nacionalizado israelí, Rabindranath Suárez Ibarra, quien vive en Jerusalén con su novia israelí, junto con otros tres michoacanos originarios del municipio de Tangamandapio.
En entrevista con Oliva Noticias, dijo que el martes por la noche se despidió de su padre en el aeropuerto de Tel Aviv, quien llevaba tres años viviendo en Israel para estar junto a su hijo.
Suárez Ibarra decidió quedarse porque, dijo, “la vida debe seguir”, mientras la guerra entre Israel y Hamás cobra vidas humanas, devastan al país, obligan a la gente a emigrar al perderlo todo por los bombardeos.
“Todo bien. Hoy fue un día más tranquilo”, dijo en la entrevista, mientras decenas de mexicanos prefirieron ser repatriados antes de vivir los horrores de la guerra y la postguerra.
Al respecto, dijo que está feliz por los primeros 276 repatriados, entre los que está su papá, junto a otros diez michoacanos.
Él, dijo, seguirá su vida en Jerusalén, pues su novia es israelí y la vida, añadió, debe seguir.
“Por lo pronto, todo sigue aquí también: el trabajo, los negocios. Todo con ciertas restricciones”, indicó, y añadió que una delegación cristiana ayudó a sus connacionales a regresar a México.
? A pesar del conflicto que se vive en #Israel, Rabindranat Suárez Ibarra, quien vive en Jerusálen con su novia israelita dijo que no tiene pensado regresar pronto a México#Nacional #OlivaNoticias #Multimedioshttps://t.co/q7cRnyRnbm
— Oliva Noticias (@olivanoticias) October 12, 2023