Ir al súper a comprar productos de uso básico es indispensable para tener nuestra alacena con lo esencial para nuestra día a día. Sin embargo, hay algunas cosas que definitivamente no debemos adquirir por salud y no lo decimos nosotros, es el consejo de una nutricionista. Así que toma nota de esto para que ni por equivocación los compres.
Es importante mencionar que los alimentos en los que más debes poner atención son los frescos, ya que estos son los que se echan a perder más rápido, pero esto no quiere decir que los que vienen empaquetados o enlatados no merecen nuestra atención, por el contrario.
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De acuerdo con la cuenta especializada en nutrición “Conciencia alimenticia”. Hay algunas advertencias que no debes pasar por alto a la hora de comprar en el súper. Saber elegir productos te puede salvar de una enfermedad del estómago, especialmente al adquirir carne o pescado congelado.
- Pollo o pescado inflado: cuando el empaque de carne congelada como el pescado o pollo, está inflado significa que hay presencia de gas generado por bacterias. Algo que definitivamente no es saludable.
- Pollo o carne mal almacenada: las torres de carne o pollo en los supermercados no cuentan con las medidas seguras para cuidar su temperatura, esto debido a que colocan hielo hasta abajo de los contenedores, por lo que solo los empaques de abajo alcanzan buena temperatura, pero los de en medio y los de arriba, no. Lo que ocasiona que la comida se pudra más rápido, especialmente la carne.
- Latas de comida dañadas: las latas están diseñadas con aluminio resistente para evitar el paso de oxígeno y no se generen bacterias, pero al abollarse puede permitir el paso de bacterias o contaminantes.
¿Cómo saber si la carne del super no está echada a perder?
Cuando compres carne congelada, ya sea de res, cerdo, pollo o pescado, verifica que cuente con selle de certificación y presta atención a su color. En el caso de la carne se debe ver de color rojo brillante y libre de manchas. No debe ser muy rígida ni muy blanda. Y no te olvides de revisar la fecha de caducidad. En caso de que notes algún olor raro o apariencia extraña evita consumirla.