El acné es una condición o “problema” con el que muchas personas tienen que lidiar en su día a día, pero ¿sabías que algunos de tus hábitos diarios podrían estar exacerbando este problema cutáneo? Según el dermatólogo certificado David Kim de Idriss Dermatology en Nueva York, el uso de productos para el cuidado de la piel demasiado pesados podría ser una de las causas más comunes del empeoramiento del acné.
Antes de agregar cualquier producto a tu rutina de cuidado facial, investiga sobre su índice comedogénico. Ingredientes como la manteca de karité o el aceite mineral, aunque son comunes en muchos productos, pueden obstruir tus poros y desencadenar brotes de acné. ¿La solución? Opta por productos sin aceite o etiquetados como “no comedogénicos”, según mencionó Kim en una entrevista para el diario HuffPost.
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Otro hábito que podría dañar tu piel y provocar acné
Por otro lado, aunque muchas personas creen que los exfoliantes son la solución para una piel radiante, pueden ser demasiado agresivos y causar más daño que beneficio. Según Kim, basta con utilizar limpiadores faciales suaves. Si no puedes resistir la tentación de exfoliar, hazlo con moderación, una vez por semana será suficiente.
¿Y qué hay de esas rutinas de cuidado facial interminables que vemos en TikTok? Kim tiene una respuesta clara: ¡no son necesarias! Según este dermatólogo, todo lo que realmente necesitas son tres productos básicos: un limpiador suave, una crema hidratante no comedogénica y protector solar. Ten cuidado también con el sudor y el maquillaje, dormir sin lavar tu cara de esos dos agentes podrá provocar brotes de acné.
¿Qué otras causas provocan el acné?
De acuerdo con la Clínica Mayo, “el acné es un trastorno de la piel que ocurre cuando los folículos pilosos se tapan con grasa y células cutáneas muertas. Causa puntos blancos, puntos negros o granos… Según su gravedad, el acné puede causar sufrimiento emocional y dejar cicatrices en la piel”. Y hay cuatro causas principales:
- Exceso de producción de materia grasa (sebo)
- Folículos pilosos obstruidos por materia grasa y células muertas de la piel
- Bacterias
- Inflamación
El acné afecta zonas como el rostro, el pecho, la frente, así como la parte superior de la espalda y los hombros; las alteraciones hormonales, el consumo de ciertos medicamentos que contienen elementos como corticosteroides, testosterona o litio, y una dieta rica en carbohidratos, pueden contribuir a la problemática. Aunque el estrés por sí mismo no origina el acné, sí tiene el potencial de agravar la situación en quienes ya lo padecen.