La Cámara Alta del Parlamento de Alemania aprobó este viernes la legalización parcial del cannabis en el país europeo, dando ‘luz verde’ a una legislación que permitirá a partir del 1 de abril la posesión y el cultivo de mariguana para adultos, con numerosas disposiciones para el consumo personal.
A pesar de las numerosas críticas, no hubo mayoría en el Bundesrat a favor de enviar la ley a la comisión de mediación con la Cámara Baja, conocida como Bundestag, después de que el Gobierno, encabezado por Olaf Scholz, prometiera recientemente modificar algunas de las normas con carácter retroactivo. Ahora falta la firma del presidente, Frank-Walter Steinmeier, de cara a su promulgación.
De esta forma, será legal que los adultos mayores de 18 años posean hasta 25 gramos de cannabis para uso personal y se permitirá cultivar tres plantas de cannabis en el hogar y poseer hasta 50 gramos de cannabis para uso personal. Sin embargo, estará prohibido su consumo en espacios públicos en escuelas, instalaciones deportivas y a la vista de las mismas, concretamente a menos de cien metros de la entrada en línea recta.
La ley también autoriza las “asociaciones de cultivo” no comerciales para adultos, en las que hasta 500 miembros residentes en Alemania pueden cultivar cannabis colectivamente y distribuirlo entre sí para consumo personal, con un máximo de 50 gramos por miembro al mes.
Antes de la votación, el ministro de Salud, Karl Lauterbach, hizo campaña a favor de la ley, que calificó como una oportunidad para proteger a las generaciones más jóvenes, en particular, del consumo y el mercado negro mediante la despenalización y una mejor educación. En un plazo máximo de 18 meses tras la entrada en vigor de la ley deberá ser presentada una evaluación inicial de su impacto en la protección de niños y jóvenes.
Hasta poco antes de la reunión, no se sabía con certeza si la ley superaría el último obstáculo, dado que tres comisiones recomendaron que se recurriera a la comisión de mediación. De hecho, la comisión de Salud, decisiva en este asunto, propuso aplazar la entrada en vigor de la ley hasta el 1 de octubre.
El Gobierno incluyó varios puntos críticos para evitar un procedimiento de mediación, para lo cual algunas modificaciones posteriores se aplicarán antes del 1 de julio. En una declaración que se registrará en el Bundesrat, el Ejecutivo prometió más apoyo a la educación y la prevención, especialmente para niños y jóvenes, así como normas de aplicación más flexibles.