ERUSALÉN (AP) — Combatientes de Hamas se abrieron paso fuera de la cercada Franja de Gaza y asaltaron poblaciones israelíes cercanas, donde mataron al menos a 250 personas y secuestraron a otras en un ataque sorpresa sin precedentes durante un importante feriado judío el sábado. Israel respondió con ataques en Gaza que mataron a 232 personas y anunció más. El presidente dijo que Israel estaba en guerra y prometió cobrarse un “precio sin precedentes”.
En un asalto de una amplitud asombrosa, hombres armados de Hamas irrumpieron en 22 localidades fuera de la Franja de Gaza, incluidas ciudades y otras comunidades situadas hasta a 24 kilómetros (15 millas) de la frontera de Gaza. En algunos lugares rondaron durante horas, acribillando a civiles y soldados mientras el ejército israelí trataba de reaccionar.
Los tiroteos continuaron hasta bien entrada la noche, y los atacantes retuvieron rehenes en dos poblados y ocuparon una estación policial en una tercera localidad, donde las fuerzas israelíes lucharon hasta el domingo por la mañana para recuperar finalmente el edificio.
El ejército israelí dijo el domingo que sus fuerzas combatían incursiones de Hamas en ocho lugares. Un vocero del ejército dijo que dos situaciones de rehenes se habían “resuelto”, sin aclarar si todos las personas capturadas habían sido rescatadas con vida. Al menos 26 soldados habían muerto en los ataques, señaló.
En algunas poblaciones, los cuerpos de los civiles seguían tirados allá donde encontraron a los asaltantes. Al menos nueve personas baleadas en una parada de autobús en la localidad de Sederot estaban en camillas en la calle, con sus bolsas al lado en la acera. Una mujer gritaba abrazada al cuerpo de un familiar cubierto por una sábana, junto a una motocicleta tirada.
Los ataques aéreos israelíes se intensificaron al anochecer en Gaza, donde arrasaron varios edificios residenciales con gigantescas explosiones, entre ellos una torre de 14 pisos que albergaba docenas de apartamentos, así como oficinas de Hamas en el centro de Ciudad de Gaza. Israel lanzó una advertencia momentos antes.
Al menos 232 personas murieron en la Franja de Gaza y 1.700 resultaron heridas en ataques israelíes, según el Ministerio palestino de Salud.
Medios israelíes que citaron a servicios de rescate dijeron que al menos 250 personas habían muerto y 1.500 resultaron heridas en el ataque del sábado, lo que lo convertía en el más cruento en Israel en décadas. Los combatientes de Hamas se llevaron a un número desconocido de soldados y civiles capturados a Gaza.
El conflicto amenazaba con escalar tras las promesas israelíes de represalias.
En un discurso televisado el sábado por la noche, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que las fuerzas militares israelíes utilizarán todas sus fuerzas para destruir las capacidades de Hamas. “Convertiremos en ruinas todos los lugares en que Hamas se esconde, en los que opera”, afirmó.
Salgan de ahí ahora”, dijo Netanyahu a los residentes de Gaza, que no tienen forma de abandonar el diminuto y sobrepoblado territorio mediterráneo.
Los 2,3 millones de habitantes de Gaza han sufrido un bloqueo de fronteras, mantenido con intensidad variable por Israel y Egipto desde que los milicianos de Hamas tomaron el control del territorio en 2007.
Conflictos anteriores entre Israel y los gobernantes de Hamas en Gaza han provocado muertes y destrucción generalizada en Gaza y días de fuego de cohetes sobre poblaciones israelíes. La situación podría ser más volátil en esta ocasión dado que el gobierno ultraderechista israelí se ha visto golpeado por la brecha de seguridad y ante la desesperación de los palestinos por una ocupación sin final a la vista en Cisjordania y el asfixiante bloqueo de Gaza.