BEIRUT (AP) .– El ejército israelí informó que su fuerza aérea atacó el lunes objetivos del grupo militante Hezbollah “en las profundidades del Líbano”, donde los residentes reportaron explosiones cerca de la ciudad nororiental de Baalbek. Al menos dos personas murieron en los ataques, según un funcionario de Hezbollah.
Los ataques son de los más profundos en el Líbano desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamás hace más de cuatro meses. Se producen un día después que el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, prometiera intensificar los ataques contra Hezbollah en Líbano incluso si se alcanza un alto el fuego con Hamás en la Franja de Gaza.
Los ataques, que se produjeron poco después de que Hezbollah dijera que su defensa antiaérea había derribado un dron israelí, probablemente aumentarán las tensiones a lo largo de la frontera entre Líbano e Israel, mientras se celebran conversaciones para un cese del fuego en Gaza.
Por la tarde, Hezbollah aseveró que tomó represalias por los ataques aéreos cerca de Baalbek disparando 60 cohetes Katyusha hacia un comando de división del ejército israelí en los Altos del Golán ocupados por Israel en Siria. El ejército israelí confirmó que el lunes por la tarde se lanzaron decenas de cohetes desde el Líbano hacia Israel.
Funcionarios de seguridad libaneses dijeron que la fuerza aérea israelí llevó a cabo tres ataques aéreos en las afueras de la aldea de Bodai, cerca de Baalbek, dirigidos contra un convoy de camiones. Bodai es un bastión de Hezbollah.
Un funcionario de Hezbollah confirmó que tres ataques se produjeron cerca de Baalbek. El funcionario habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a informar a los medios. Dijo que los ataques cobraron la vida de al menos a dos personas y que uno de ellos impactó un almacén de productos alimenticios que forma parte del Proyecto Sajjad de Hezbollah, que vende a la población de su bastión a precios más bajos que en el mercado.
Posteriormente, Hezbollah publicó los nombres y fotografías de dos de sus combatientes sin decir dónde fueron asesinados. Las muertes más recientes elevan a casi 210 el número de combatientes de Hezbollah que han muerto desde que comenzaron los intercambios de fuego a lo largo de la frontera el 8 de octubre.
Un soldado del ejército libanés que estaba fuera de servicio y en casa resultó gravemente herido en uno de los ataques cerca de Baalbek, dijo un funcionario libanés con conocimiento de la situación. El hijo del soldado también resultó herido, añadió el funcionario, que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a compartir información con periodistas.
Los ataques aéreos cerca de Baalbek se produjeron menos de dos horas después que Hezbollah dijera que sus combatientes derribaron el lunes un dron israelí Elbit Hermes 450 sobre su bastión en una provincia del sur del Líbano. Otro misil disparado por Hezbollah contra el dron fue interceptado por Israel y cayó cerca de una sinagoga en una localidad cercana a Nazaret, en el norte de Israel. No hubo heridos ni daños.
El ejército israelí declaró más tarde que sus cazas habían atacado instalaciones utilizadas por Hezbollah en el valle oriental de la Bekaa. Según el comunicado, se trataba de una represalia por el lanzamiento por parte de Hezbollah de un misil tierra-aire contra un dron israelí.
Hezbollah ha estado intercambiando fuego con las tropas israelíes a lo largo de la frontera desde que empezó el conflicto entre Israel y Hamás el 7 de octubre.
El ataque contra Baalbek, debido a su ubicación en el interior de Líbano, es el más importante desde el ataque aéreo de principios de enero contra Beirut en que murió el alto cargo de Hamás, Saleh Arouri.