“Yo, como entrenador, tengo la obligación de invitarlos”. Con esa rotunda frase, el seleccionador de Argentina sub-23, Javier Mascherano, abrió la puerta a un sueño que millones de hinchas empezaron a contemplar este domingo, cuando su equipo obtuvo el boleto a los Juegos Olímpicos de París 2024.
La convocatoria a la cita olímpica se podrá engrosar con dos hombres de la talla de Lionel Messi y Ángel di María, algo que más allá de alimentar la fantasía de los aficionados albicelestes, emociona a cualquier seguidor del buen futbol.
El ‘Jefecito’ declaró a los micrófonos nada más concluir el Preolímpico disputado en Venezuela.
Obviamente vamos a hablar. Todos conocen mi relación con Leo y con Ángel: somos amigos, tenemos una relación espectacular. Yo, como entrenador, tengo la obligación de invitarlos; pero uno también entiende que tienen otros compromisos y dependerá también de eso. No es tan sencillo.
“TENGO LA OBLIGACIÓN DE INVITAR A MESSI Y DI MARÍA”
“Con Leo y Ángel tenemos una relación espectacular, somos amigos. COMO ENTRENADOR TENGO LA OBLIGACIÓN DE INVITARLOS pero uno entiende que tienen otros compromisos y dependerá de eso, no es tan sencillo”, firma Javier Mascherano pic.twitter.com/SRNZeKC7Cd— TyC Sports (@TyCSports) February 12, 2024
Su victoria por 1-0 sobre Brasil no sólo dio la clasificación a la ‘Albiceleste’, sino que enterró las opciones de Brasil y facilitó el título en el torneo a Paraguay, que también viajará a París.
La felicitación pública de Messi en su cuenta de Instagram no hizo sino alimentar el anhelo de los seguidores argentinos, que, desde el 18 de diciembre de 2022, cuando su ídolo les dio el tercer título mundial, desmenuzan y diseccionan cualquier palabra que diga o escriba, e inundaron las redes sociales con la petición de que la ‘Pulga’ acuda a París 2024.
Ya en enero pasado, en plena preparación para el Preolímpico Sudamericano que concluyó este domingo, Mascherano había declarado que Messi y Di María “se ganaron la posibilidad de elegir” y que, si ellos quieren acudir a la cita olímpica, “lo pueden hacer”.
Consciente que la Copa América 2024, que se disputa del 20 de junio al 14 de julio y en la que Argentina defiende el título logrado en 2022, será -como él anunció en su día- la despedida de la selección del ‘Fideo’, el ‘Jefecito’ ya expresó en ese momento que “también sería un lindo cierre en los Juegos”, que tendrán lugar del 26 de julio al 11 de agosto.
Brillo olímpico
Además de los innumerables títulos que acumula como exjugador en clubes como River Plate, Corintians y, sobre todo, Barcelona, Mascherano tiene en su palmarés un curioso logro: es el único futbolista argentino que atesora dos oros olímpicos, los que consiguió la Albiceleste en Atenas 2004 (sobre Paraguay) y en Pekín 2008 (sobre Nigeria).
Esos son, precisamente, los únicos títulos del balompié argentino en la historia olímpica, ya que las otras finales a las que llegó, Amsterdam 1928 y Atlanta 1996, las perdió ante Uruguay y Nigeria, respectivamente.
En Pekín 2008, Mascherano -que fue uno de los mayores de 23 convocados por el entonces seleccionador, el campeón del mundo en 1986 Sergio Batista- compartió plantel con otro ‘veterano’, Juan Román Riquelme, y los sub-23 Sergio ‘Kun’ Agüero, Éver Banega, Fernando Gago, Ezequiel Lavezzi y Pablo Zabaleta, entre otros.
En ese equipo también se encontraban Messi y Di María, quienes ya habían ganado, respectivamente, el Mundial sub-20 de Países Bajos 2005 y Canadá 2007. Ambos fueron grandes protagonistas en la final, ya que el ‘Fideo’ anotó el gol del triunfo, pero la asistencia fue obra de la ‘Pulga’, quien dio un pase desde el centro del campo para la carrera de su paisano rosarino.
Juan Román Riquelme gana la dividida y le queda a Lionel. Messi mete un pase-gol sublime para Di María. Y Fideo, con nervios de acero. El golón a Nigeria en la final por el Oro en Beijing 2008.
Hoy, hace 14 años. Como si fuera ayer. 🇦🇷👏🏼
pic.twitter.com/2o7EtxezEP— Ataque Futbolero (@AtaqueFutbolero) August 23, 2022
Ambos tienen la oportunidad de regresar a la capital francesa, a la ciudad en la que ambos jugaron con suerte dispar -más allá de los títulos logrados, Di María fue fundamental en sus siete temporadas en el Paris Saint-Germain mientras que Messi jamás se sintió bien en los dos años que allí permaneció-.
Nadie sabe si sus complicados calendarios les permitirán acudir a otros Juegos Olímpicos y, menos aún, alcanzar a Mascherano en la gloria de sumar su segundo oro. Pero si de algo saben los argentinos es de mantener viva la llama del sueño y, por eso, nadie les quita la ilusión de ver a Messi y Di María en París 2024.
(Con información de EFE)