CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Emilio Lozoya Austin, exdirector de Pemex, logró evitar, por ahora, que las autoridades lo trasladen de reclusorio o decidan cualquier cosa relacionada sobre su libertad, mientras se resuelve el amparo que solicitó.
La jueza Primero de Distrito de Amparo en materia Penal en la Ciudad de México, Sandra Leticia Robledo Magaña, concedió una suspensión definitiva al exfuncionario, quien reclamó la resolución dictada en diciembre pasado por un juez de control, en la que rechazó modificar la prisión preventiva justificada que lo mantiene en el Reclusorio Norte desde el año 2021 por el caso Odebrecht.
La suspensión no tiene como efecto la libertad de Lozoya, sino que quede a disposición del juzgado de amparo en el Reclusorio Norte hasta que la juez dicte su sentencia, lo que puede ocurrir luego de que el próximo 15 de febrero celebre la audiencia constitucional.
Es decir, que no podrá ser trasladado a otro centro de reclusión ni puede ser modificada por ahora la medida de prisión preventiva justificada hasta que la jueza determine si le concede o no el amparo.
Mientras tanto, el proceso penal puede continuar de manera normal ante el juez de control.
La resolución contra la que Lozoya solicitó el amparo fue emitida el 15 de diciembre pasado en audiencia ante el juez de control, en la que pidió cambiar la prisión preventiva justificada por libertad condicional.
En la audiencia, el juez José Rivas González rechazó la solicitud al considerar que prevalece el riesgo de que Lozoya escape, además de que aún no ha cumplido dos años en prisión porque se perdió la continuidad del proceso debido al criterio de oportunidad que solicitó a la FGR y por el que sus audiencias intermedias fueron aplazadas en diferentes ocasiones.