El cartel de Semana Santa de Sevilla, España, ha generado polémica y posiciones encontradas en redes sociales y en medios internacionales, debido a que la imagen es considera por algunas personas como una representación de Jesucristo “amanerada y sexualiazada”.
En la imagen, creada por el artista Salusiano García, se observa a Jesús con el rostro fino y una barba bien delineada, además, todo su pecho se encuentra desnudo, mientras que su ingle es cubierta por una manta que deja entre ver sus muslos.
Su diseño causó la indignación del Instituto de Política Social (Ipse), quien tachó la obra como “una verdadera vergüenza y aberración” al “amanerar” y “sexualizar” la figura religiosa, afirmaciones que fueron secundadas por algunas personas de redes sociales.
En Italia, algunos medios se hicieron eco del revuelo suscitado, como la agencia pública de noticias ANSA, que habló de “polémica” por una obra “con un Cristo joven resucitado, coronado con tres espigas y apenas cubierto con un paño blanco”.
Otros medios, como Il Messaggero, fueron más allá y la calificaron de “polémica feroz” por el “Cristo gay de la Semana Santa de Sevilla” con la apariencia de “un modelo icónico tomado de la cultura queer“.
En la tarde del pasado 27 de enero, la controversia dio un paso más cuando un usuario inició una recogida de firmas para reclamar la retirada del cartel, que ayer lunes ya contaba con casi 10 mil adhesiones.
El autor respondió a estas críticas asegurando que su intención a la hora de realizar el cartel era “anunciar la Semana Santa, que es la función de cualquier cartel”, con un “Cristo joven, bello, sin marcas de su tortura”, con su hijo Horacio como modelo.
El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, consideró “artificial” la polémica y defendió al autor, a quien catalogó como uno de los pintores contemporáneos más importantes que hay en el país, recalcando que, cuando se le encargó el cartel, “todo el mundo” conocía su obra.
“Hay carteles más arriesgados, hay carteles más clásicos, hay carteles más valientes (…) y a mí éste me gusta”.
Representantes del colectivo LGTBI también lo defendieron, como Manolo Rosado, presidente de la Red Estatal de Municipios Orgullosos, que aplaudió el cartel calificándolo de “rompedor”.
Entre las personas que defendieron al artista en aquel momento estaba la entonces coordinadora de la federación andaluza de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales Andalucía Diversidad, Cira López, quien lamentó que algunas críticas contenían términos homófobos, con un “claro delito de odio”, en su trasfondo.
(Con información de EFE y AN)