CIUDAD DE MÉXICO (AP).- Amazon está intentando de nuevo convertirse en una fuente habitual de atención médica para sus clientes con el lanzamiento de un servicio centrado en consultas virtuales.
El gigante del comercio electrónico anunció que sus clientes Prime ahora pueden obtener acceso rápido a un proveedor de atención médica a través de un programa que cuesta 9 dólares al mes o 99 dólares anuales.
El anuncio se da menos de un año después que Amazon anunciara la adquisición por 3 mil 900 millones de dólares del proveedor de atención médica general basado en membresía One Medical, que tiene consultorios en más de 20 mercados.
Amazon realizó varios intentos de incorporar la atención médica a su plataforma y ha comenzado a ganar impulso después de algunos reveses iniciales.
La compañía anunció en agosto que agregará consultas de telemedicina por video en los 50 estados a una clínica virtual que lanzó el año pasado.
Sin embargo, el verano pasado Amazon suspendió un servicio de atención médica virtual que desarrolló durante años, y formó parte de un fallido esfuerzo de alto perfil para abordar los costos de atención médica en asociación con otras dos empresas importantes, Berkshire Hathaway y JPMorgan.
A través del nuevo servicio, los pacientes podrán conectarse virtualmente las 24 horas del día con proveedores de atención médica a través de su programa de membresía Prime One Medical. El servicio incluye chats de video y una opción para realizar visitas en persona a consultorios de One Medical cercanos.
La compañía indicó el miércoles que su cuota de membresía cubre el costo de las consultas médicas virtuales. Pero los pacientes tendrán que pagar de manera adicional por cualquier visita que realicen a las oficinas de atención general de One Medical de la compañía, para lo cual pueden usar un seguro médico.
La atención virtual se hizo popular durante la pandemia de COVID-19 y desde entonces muchos proveedores de atención médica han ampliado sus ofertas de telemedicina. Sigue siendo popular como una forma conveniente de consultar a un médico o atender problemas de salud relativamente menores, como la conjuntivitis.
Si bien las consultas virtuales pueden ayudar a mejorar el acceso a la atención, a algunos médicos les preocupa que también lleven a una fragmentación de la atención médica y puedan dificultar el seguimiento de la salud general del paciente. Eso podría darse si un paciente cuenta con un médico habitual que no se entera de la consulta virtual proporcionada por otro proveedor.