El hospital Al Shifa, el mayor complejo médico de la Franja de Gaza, agotó este sábado sus reservas de combustible y ya no dispone de generadores de electricidad, según el Ministerio de Sanidad gazatí, que ha alertado de la situación del centro tras los ataques lanzados en esta zona en las últimas horas por las fuerzas israelíes.
“Este es el momento del que habíamos estado alertando al mundo”, dijo el viceministro de Sanidad de la Franja, Yusef Abu Alreesh, en declaraciones a la cadena Al Yazira. El complejo permanecería completamente sitiado, lo que mantiene atrapadas en el interior a numerosas personas, y el futuro de los pacientes es incierto, entre ellos 39 bebés en incubadoras.
El director del hospital, Muhamad Abu Salmiya, confirmó también en una entrevista en Al Yazira que en las últimas horas ha muerto un bebé que estaba en una incubadora y un joven ingresado en cuidados intensivos. Sin posibilidad de contacto con el mundo exterior, “estamos a varios minutos de la muerte”, lamentó.
El responsable del Ministerio afirmó que varias familias intentaron salir del hospital pero fueron tiroteadas, por lo que sus cuerpos quedaron tirados en las inmediaciones, sin posibilidad de que alguien pueda recuperarlos por la presencia de francotiradores de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
Los militares intensificaron su ofensiva bajo la premisa de que el hospital es un objetivo legítimo. El Ejército llegó a denunciar que bajo el subsuelo del centro el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) oculta su principal cuartel y un portavoz militar consultado por Europa Press alegó este sábado que las autoridades israelíes han insistido en la evacuación de toda la zona norte de la Franja, hospitales incluidos.
El viernes, al menos trece personas murieron por el impacto de un proyectil en las inmediaciones del hospital de Al Shifa. Según el Gobierno de Gaza, el misil fue disparado por las fuerzas de Israel, mientras que estas últimas han atribuido el incidente a un cohete fallido lanzado por las milicias palestinas.
Las organizaciones internacionales han expresado su preocupación por la vulnerabilidad de las instalaciones médicas de Gaza y, en las últimas horas, pusieron el foco en el caso de Al Shifa. “Las informaciones que llegan son preocupantes”, denunció el responsable regional del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Fabrizio Carboni, en su cuenta de la red social X.
“No se puede seguir así. Hay miles de heridos, desplazados y trabajadores médicos en peligro. Necesitan protección, tal como marcan las leyes de la guerra”, añadió, en un llamamiento a respetar el Derecho Internacional que también han lanzado otros organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) o Médicos Sin Fronteras (MSF).